La piedra de la paciencia

Durísima historia dirigida por Atiq Rahimi sobre el papel de la mujer contado en el "silencio" del marido, un monólogo bien protagonizado por Golshifteh Farahani, con una paciencia inicial para visualizar los sentimientos encontrados con una carga de gran profundidad, castigado por una soledad de amplísima dureza y crueldad, a través de una delicada fotografia. Una película difícil de DIGERIR

No sé qué tan grande sea la industria del cine afgano (me imagino que grande no ha de ser), pero he tenido la oportunidad de ver un par de sus producciones, y la verdad me dejan un buen sabor de boca, y esperanzas de que en este país se sigan realizando producciones de buen nivel.

Ahora hablando directamente de lo que nos deja, La piedra de la paciencia, hay que decir que a pesar de ser un film con una premisa muy interesante y planteamiento en un escenario tan desbastado física y moralmente, no logra ser una obra redonda.
Me encuentro de acuerdo con algunas críticas que citan que su metraje pudo ser excesivo, y eso que hablamos de una película, que solo dura unos cien minutos, pero a la cual se le pudieron ahorrar unos quince.

Sus primeros veinte minutos son atrapantes, y dejan un Sentimiento de aflicción producido por el dolor ajeno. Hasta ahí todo bien, una buena fotografía, un buen guion, y se empieza a notar el buen papel a realizar por Golshifteh Farahani. Ya en la segunda parte de la película el ritmo se torna un poco lento, pero no se nota cansino. Y es ya en su tramo final donde infortunadamente no termina de cuajar, por alguna pega que al espectador no convence. Aun así es una buena obra para visualizar, en donde se nota buena fotografía, una actuación muy correcta por parte Golshifteh Farahani, en una historia bastante interesante.

La película empieza un poco lenta pero una vez "entrados en materia" no deja de sorprender (y de horrorizar). La forma en que la protagonista cuenta las atrocidades a que se ven expuestas las mujeres de esta cultura/religión. Ya conocía bastantes cosas de esta gente pero aun así me he quedado de piedra por "las costumbres" que se denuncian en esta cinta. Por otro lado, se hace muy interesante y bien llevada. La actriz (ya que casi recae todo el peso de la película sobre ella) lo hace muy bien. Muy recomendable.

La vida y la muerte, el miedo, la supervivencia, la búsqueda, la violencia y otros elementos que podríamos nombrar la hacen interesante. Uno de mis preferidos, la constatación del valor liberador y fortalecedor de la palabra. Lo no dicho, los sentimientos y vivencias, los secretos que nunca antes había desvelado van fluyendo de los labios de la protagonista, una bella e inteligente Sherezade, transformándola.
Una película que recordaré durante largo tiempo. Por diversas razones. Visiónenla y me dicen.

Puede que esta crítica pueda resultar ofensiva, pero es mi opinión: La piedra de la paciencia es la típica película hecha por y para progres. Me explicaré: partiendo de que ninguna mujer afgana va a poder verla, y de que no tengo claro de que le gustara, esta película está concebida bajo unos cánones absolutamente occidentales, tanto en lo visual como en los recursos narrativos, y su objetivo de público somos nosotros, y más concretamente ciertos sectores y/o festivales. La puesta en escena es absolutamente teatral (de hecho recuerda a un Cinco horas con Mario con talibanes de fondo), y aunque las actuaciones son de calidad se hace pesada a ratos por la reiteración de ideas y situaciones, conduciendo a un final abracadabrante pero hermoso en su simbolismo. Considero un error el sesgo feministoide que posee, y que hace que el mensaje tan respetable que quiere transmitir se vea diluído, de modo que el hecho de que todos y cada uno de los varones que sale en la película o es intrínsecamente malvado o estúpido hace que todos aquellos de nosotros que nos consideramos sensibles y partidarios de la igualdad de sexos nos removamos incómodos en nuestras butacas. En resumen, película de desgracias interminables que juguetea con el panfleto.