Romanzo criminale - La serie (Serie de TV)

Tal vez el argumento y los personajes no sean nada del otro mundo: una panda de ladrones de poca monta que terminan reinando en el narcotráfico callejero de Roma bajo el liderazgo de un tipo apodado el Libanés, bien cubierto por un par de capos totalmente opuestos como son el Dandi y Freddo. En la primera temporada asistimos a la ascensión de la banda hasta convertirse en los dueños del negocio y codearse con gente de la Mafia, la Camorra y hasta los servicios secretos. Y todo mientras un pobre Comisario les persigue sin lograr apenas resultados. En la segunda temporada llega la inevitable caída, la decadencia y en especial el enfrentamiento entre personajes.

El mérito de Roma Criminal está en un magnífico casting (especialmente Vinicio Marchioni y su gélido Freddo, y Alessandro Roja que nos regala ese Dandi cuya evolución marca buena parte de los conflictos internos) y en una ambientación absolutamente formidable de la Italia de 1977 a 1989. No sólo por un tema de producción (vestuario, peinados, coches etc) sino por la fotografía: parece tal cual una serie rodada en esos años, lo cual no tiene mucho sentido pero funciona y es sorprendente ver como esta serie daría casi el pego como producto de época.

Tal vez el argumento entra en algunos bucles durante la segunda temporada pero a la vez los personajes adquieren mucha más relevancia que en la primera temporada, especialmente en el caso de Freddo, el alma de la serie y a la postre el que canaliza los sentimientos más humanos pese a su fijación por ofrecernos todos los registros posibles de un cubito de hielo.

Synch

Fantástica interpretación y evolución de todos los personajes a lo largo de la serie. La banda de la Magliana nos acogerá como a uno más, sintiendonos partícipe de todas sus artimañanas, trapicheos, robos y asesinatos. El libanés, el frío, pero sobre todo Dandy, con un trabajo fantástico, nos haran disfrutar de una gran serie.

Imprescindible en toda colección de los amantes del cine mafioso. Basada en hechos reales, cuenta la historia de la mayor banda criminal en Roma en los años ochenta. Una serie muy adictiva y envolvente desde el comienzo, con dos temporadas espléndidas. Los personaje son realmente carismáticos: el Frío, el Dandy, el Terrible, el Libanés, Búfalo... excelentemente perfilados y con actuaciones soberbias, mantienen un nivel altísimo y quedan en la memoria. Al llegar al final, te quedarás con ganas de más.

Siempre me han gustado las series/películas que abordan temas como la mafia o la droga. De pura casualidad y gracias a FilmAffinity (que haría yo sin ti) descubrí esta serie italiana.
Magnifica, espectacular, sublime, buenísima, obra maestra y un largo etc. para definirla.
La trama es buenísima y te mantiene en tensión cada capítulo, los actores bordan sus papeles y crean unos personajes que ya forman parte de mi mundo televisivo (Libanés, Frío, Dandi, Buffalo, Negro, Tio Carlo, Puma, Nembo Kid), unos decorados muy acordes a su época (además de los coches) y una banda sonoro que es caviar para los oídos.
Es una pena que aquí, en España, tengamos que conformarnos con el Duque, la Roca o Pancho. Cuanto nos queda por aprender, aunque no tan lejos de aquí, en Italia ya nos han enseñado el camino.
En resumen, una serie muy buena, muy recomendable, de tan solo 22 capítulos y que para mi gusto, personalmente, está entre las 5 mejores series de la historia de la TV.

Magnífica serie, muy bien ambientada en los finales de los 70 y principios de los 80, con los decorados, vestuario, y estupenda banda sonora, italiana (Vasco Rossi, Pino Danielle, Franco Battiato, ...), e internacional (Joy Division, sSoft Cell, ...).
Si han visto The Sopranos (imposible no buscar/encontrar paralelismos), esta serie puede parecer peor hecha, más burda, menos "espectacular". Pero precisamente ahí radica su encanto, su magnetismo, su verosimilitud.
Los actores, todos, están inmensos, desde los principales hasta el último secundario. Y su evolución , desde los primeros episodios hasta los últimos es GRANDE, GRANDE.
Eso sí, imprescindible verlo en versión original, italiano. Qué diferencia.
Viva Roma!!!