Habitación perdida (Miniserie de TV)

The lost room es, para mi gusto, una de las mejores series de fantasía que he podido ver en tv. En parte por un cuidado sentido del humor, un casting excelente (más que la buena actuación de los actores, es que están muy bien elegidos, salvo quizás la chica) y la falta de pretensiones, que (por fin) no está reñida por un guión imaginativo y consecuente.
Desgraciadamente, en las películas y series de fantasía y terror se asume, por lo general, que si uno está dispuesto a aceptar que hay magos o vampiros, también tragará con el hecho de que los vampiros que al principio de la película son todopoderosos y matan sin despeinarse se vuelven lentos, débiles y tontos cuando luchan contra el héroe. Nada de eso pasa en The lost room, donde por fin los giros de guión, que los hay, no se consiguen a partir de trampas y sorpresas incongruentes que dejan al espectador frustrado por haber sido engañado vilmente.
Su sentido del humor, rayando a veces el absurdo, es para mi gusto otro de sus fuertes, aunque soy consciente de que probablemente no todo el mundo piense como yo. Da igual: si alguien piensa así, en lugar de un 10 le pondrá un 8, y seguirá mereciendo la pena

Miniserie de seis capítulos del género fantástico.

Mucho misterio en torno a la habitación de un motel que desapareció, junto con los objetos que en ella se encontraban y que recibieron peculiares poderes que se van desvelando a lo largo de la serie. Un policía que se encuentra realizando una investigación donde cae en su poder una llave, la de la habitación del motel número 10, que abre todas las puertas y que conduce inevitablemente a la habitación, en un bucle de realidades paralelas.

Inteligente puesta en escena y sugerente idea, si no fuera porque la hija pequeña del policía se ve atrapada en ese bucle espacio/tiempo, mientras su padre intenta rescatarla.

Conocidos actores asiduos a las series de TV con indudable éxito le dan empaque al producto, cuyo final, posiblemente con la esperanza de producir una nueva temporada, deviene un tanto decepcionante. Quizás otra media docena de capítulos más para cerrar todas las historias de los protagonistas se echan en falta.

Mi nota, un notable, 7.

Esta intrigante miniserie en un principio no está nada mal. Sociedades secretas, objetos con propiedades atípicas, gente que ambiciona poder, misterio y acción. Sólo tiene un pequeño defecto, que según se mire puede ser grande. Deja muchas cosas importantes a las conjeturas de nuestra imaginación, así no se complican la vida buscando un desenlace creible. Así y todo me gustó, a pesar de ser de tan solo 6 capítulos.

La serie te atrapa y te da curiosidad por saber en que va a terminar desde el primer episodio. Sí, es fabulosa por muchos motivos: por su originalidad, por su fantástica e intrigante trama y porque es la primera vez que veo una serie y estoy totalmente perdido, no puedo dar una teoría coherente sobre lo que puede ser la habitación o los objetos. Solamente sé que me resultó fascinante la trama principal de este producto.

Ahora viene la pega: aunque la serie está muy bien en su conjunto, el final no me ha agradado porque nos dejan con la intriga de saber qué son las piedras angulares de la historia. También muchísimas dudas más, deberían de hacer una segunda temporada aunque fuese cortita como esta y desarrollar un poco más la trama para hirvanar estas cuestiones. La verdad es que el final es algo que no sabes que pensar, ni que ha pasado, ni porque ha pasado. Te quedas patidifuso. Yo hasta pensé que no me había descargado todos los episodios y tuve que mirar en internet que no me faltaba ninguno.

P.d.: La malo de esta cinta es que no tiene final, una cosa es no dar explicación a todo y otra cosa es no explicar nada como hacen en esta miniserie.

Interesante la propuesta de esta miniserie de ciencia ficción, en la que una llave maestra abre todas las puertas, para dar a la Habitación. Desde allí, la puerta de la habitación es capaz de llevar a quien posea la llave a cualquier lugar en el que exista una puerta.

Los 6 capítulos aquí emitidos (3 dobles en realidad) nos presentan la búsqueda de Anna, la hija de Joe, a la vez que la de los objetos desde diferentes frentes. Y es que, mientras algunos creen que reuniéndolos todos se podría llegar a hablar con Dios, otros avecinan el fin de esta realidad, y son por tanto muchos los intereses tras ella.

Entretenidos en todo momento, lo único que se le puede achacar en contra de esta miniserie son algunas agujeros o contradicciones en el guión, pero que se pueden comprender por la extensión de la miniserie, que apenas llega a las 4 horas. Por ello, los acontecimientos no tardan en sucederse uno tras otro, los personajes de encontrarse, y la historia de avanzar, lo que mantiene el interés en todo momento. El drama (demasiado facilón, tópico incluso) se mezcla con pequeñas dosis de comedia (genial el patético personaje interpretado por Roger Bart), pero sobre todo con la intriga por saber más sobre los objetos, aunque al final resulte a mi gusto mucho más floja de lo que esperaba, sin desmerecer a pesar de ello el interés por la trama hasta llegar al final, un final estupendo para la miniserie ya que, sin ser ninguna maravilla, cierra lo suficiente la historia dejando entreabierta la puerta lo suficiente para que podamos ver una continuación. No mata, pero divierte un buen rato, sin decaer, y los actores están bastante correctos.