Xanadú

Por los años 80. Se iniciaba una década multicultural. En "Xanadú" caben todas las corrientes, caben el neón y el grafiti, los colores fosforecentes, las coreografías imposibles, los pelos con laca, los pantalones acampanados y las estéticas impensables.

Por Gene Kelly. Que sí, que rozando los setenta años se marca unos pasos de baile que aún hoy hace que uno sonría de manera cómplice. Un grande con unos momentos estelares en los que demuestra que el que tuvo, retuvo.

Por la banda sonora. Una auténtica maravilla musical. Nada más que añadir al respecto. Sólamente: escúchenla.

Por Olivia. ¿Que la película es para su lucimiento personal? Y tanto. Pero de qué manera se luce. Se come el escenario y la pantalla. Y eso no puede significar más que "la musa sólo podía ser ella".

Planteada en origen como una Roller-Disco Movie de bajo presupuesto, acabó convertida en una mezcla de cosas que a nadie en su sano juicio se le hubiese ocurrido mezclar, con una Olivia Newton-John en la cima de su carrera tras Grease, se encontró con un presupuesto que jamas hubiese soñado, y parece ser que no sabían muy bien como gastarlo.

Si algo esta claro desde el principio de la película es que es única en su género, el metraje transcurre sin que estés seguro de si es el peor bodrio de la historia o una obra maestra del mal gusto.

Finalmente, complejos fuera, llegas a la extraña conclusión de que es la hermana kitsch para todos los públicos de Rocky Horror Picture Show. Con un Gene Kelly entrado en años realmente entrañable.

Algo así como el cruce entre un musical Disney y el Tommy de los Who. Un segundo visionado y la amarás, aunque no lo reconozcas en público.

No voy a decir que sea la mejor película musical que he visto, pero si una de las más entretenidas. La valoro con un 8 recordándola en la fecha de su estreno.
Si, patines, neón, trajes de la época, etc, ahora parecen fuera de lugar, pero… ¿no era la moda del momento? ¿A cuántos de nosotros nos hubiese gustado vivir una historia así? (Y de ser con Olivia mejor que mejor). :-)
Me parece muy adecuada para verla en familia, me gusta que mis hijas vean las películas que yo veía en mi juventud, que se den cuenta que había otra forma de hacer cine además de las grandes superproducciones y los grandes efectos especiales del momento.
Como ya he dicho la valoro recordándola en su fecha de estreno, pero la música de Jeff Lynne siempre será atemporal, igual que el gran Gene Kelly.

Musical de 1980 precedido por un sonoro fracaso en taquilla y que pretendía encumbrar el estrellato de la ya popular Olivia Newton-John en una intencionada historia de amor, música, bailes coreográficos y, aunque no lo parezca, no tan "cursi" como muchos pretenden hacernos creer. Por una razón; la idea de "Xanadú" (nombre también atribuido a la vieja mansión donde el ciudadano Welles vivía rodeado de fortuna como un Dios atormentado por la soledad, y en el film de Greenwald es un antiguo auditorio donde se organizaban combates de boxeo) es fusionar las diferentes etapas del musical americano con el electrizante sonido de Jeff Lynne y Electric Light Orchestra (sensacional "I´m Alive" como introducción). Dicha fusión de diferentes tipos de música ya se experimentó en "El Fantasma del Paraíso" de Brian de Palma.

En plena moda "disco"; musicales broadway del estilo "Hair", "Grease" y las óperas modernas con el sello Sir Andrew Lloyd Webber, el mundo se iba con esa música a otra parte y el inicio de los ochenta abría sus puertas de par en par a la espera de que el mercado musical se disparara (Michael Jackson en solitario empezaba a hacerse notar, el productor Giorgio Moroder llenaba multitudes en las discotecas y dinero en los bolsillos con sus composiciones también para el cine; John Lennon consolidaba el mito de su figura y The beatles con su trágico final, etc...)

El cine como formato no era un excepción. Estaba naciendo el videoclip. En cuanto al género musical, semigastado, no se les ocurrió nada más que homenajear y hermanar las distintas etapas del género con sus correspondientes retoños (un veterano Gene Kelly más artrítico que bailarín) y una sonrojada Olivia Newton-John esperando que los millones de estrellas que tenia encima de su cabeza gracias al éxito de la versión cinematográfica de "Grease" no se desvanecieran. No fue así. Ni con Travolta. Y aún repitiendo dúo en "Tal para Cual" la cantante y actriz inglesa fue olvidada por el público (no por fans) retirándose precozmente a la Australia dónde se había criado, sacando algun que otro disco con canciones "country" y baladas empalagosas, y dedicándose a lo que ella creía que mejor sabía hacer; cuidar una granja, formar una familia y dedicarse a la doma de caballos. Mejor suerte tuvo John.

Tenía muchas ganas de ver la película. Aún recuerdo a mi hermana escuchando una y mil veces el cassette de la BSO de "Xanadu", y me sabía las canciones de memoria. Ahora que la he visionado me he encontrado con un puñado de buenas canciones embutidas en un pestiño almibarado muy mal dirigido y con un argumento ñoño hasta la náusea.

Una lástima. Canciones tan chulas como "Dancin'", donde se mezcla el estilo musical de los años 40 con la música disco-ochentera (la música estaba evolucionando en 1980 de la psicodelia al pop ochentero), ha sido puesta en escena en un desastroso número musical donde los bailarines se chocan unos con otros, no están alineados ni coordinados... Penoso.

Me quedo con las canciones maravillosas ("I'm Alive", "Dancin'", "Xanadu", "Magic"...), con la bella voz de Olivia y con el monstruo del baile y la canción que fuera Gene Kelly.