Volver al futuro III

Pues por fín cierro esta trilogía realmente sorprendente y divertida que me ha gustado muchísimo, sobretodo por las dos primeras entregas que dejaron algo en mí que no deja cualquier película o saga además de tener dos cliffhanger realmente alucinantes y ahora que llegamos a la tercera y última película de Regreso al futuro, que no del Delorean con Doc porque he disfrutado de ellos en un cameo en otra película, sí consigue cerrar bien la saga pero ya sin la emoción y el factor sorpresa que tenían las dos anteriores entregas. Si bien Zemeckis y Spielberg se siguen marcando autohomenajes, la banda sonora es la mejor de la trilogía y hay bastante acción además de un espectacular e intenso final, no logra encandilarme del todo debido al cliché ya esperado y evidente por muchos, la novia de Doc, ¿Cómo no íbamos a ponerle una novia a este científico loco que luego desaparece su humor de repente? Mary Steenburgen tira por la borda en algunos aspectos lo conseguido en las otras dos entregas aun siendo una película muy disfrutable y aventurera digna para ver en familia en casa a ser posible en maratón con las otras dos.
El factor sorpresa desaparece, hay menos humor y las situaciones son más evidentes además de que el interés decae un poco debido a que es la más larga de la trilogía aunque eso no quiere decir que aburra ni mucho menos. Digo que Zemeckis podría haberse marcado una cinta al nivel de las otras dos y no lo ha conseguido pero es algo lógico, pese a que la época del oeste está muy bien y da un soplo de aire fresco a la saga tengo que decir que doy las gracias de que sea la última para no tener que decir que hay una película floja en esta maravillosa trilogía y eso se agradece a Zemeckis y Spielberg. Os debo mucho con esta trilogía porque nunca la había visto antes y ahora estoy bastante satisfecho de este trabajo de Michael J. Fox que espero que algún día vuelva a hacer algo decente y a Christopher Lloyd por haberme hecho reír tanto. Buen cierre.

Regreso al futuro III de Robert Zemeckis es un film de ciencia ficción, fantástico y comedia que concluye una saga inolvidable. Dirigida con un ritmo enérgico y con el estilo particular y efectista del director en la saga, bajo algo el listón de su predecesora pero vuelve a cumplir con un final apasionante que sorprende y cautiva a su público. Realizada de manera lúcida tiene un resultado arrollador que merece la pena descubrir para saber cómo acaba la historia.
La fotografía es alusiva a los distintos tiempos recorridos, confeccionando un trabajo llamativo y repleto de detalles del western. La música es sensacional y característica de la trilogía gracias de nuevo a Alan Silvestri que vuelve a cumplir con sus sonidos excitantes que acompañan de modo magistral la acción. Los planos y movimientos de cámara vuelven a construir un oportuno trabajo técnico mediante el uso de la cámara en mano, grúas, seguimiento, travellings, generales, panorámicos y reconocimiento. Destaca de nuevo unos efectos visuales espléndidos y bien elaborados.
Las actuaciones se mantienen en el estilo de su predecesora pero baja algo su intensidad. Como protagonistas Michael J. Fox vuelve a trabajar con personalidad propia y Christopher Lloyd está auténtico en una acertada labor, siendo estupendos los acompañamientos de Mary Steenburgen, Thomas F. Wilson, Lea Thompson y Elisabeth Shue entre otros. Para estos emplea la dirección artística unos vestuarios y caracterizaciones sugerentes al western en una esmerada labor que junto con los típicos decorados te transportan in situ.
El guion, escrito por Bob Gale y basado en una historia suya y del director, es apasionante pero tan solo al final, el resto es más lineal y de menos interés que el resto de films de la saga, aunque desde luego cumple y da un digno final a una historia asombrosa e inolvidable dentro del género. Esto se lleva a cabo con la narrativa habitual y rápida de los personajes y sus juegos de palabras expresivos. Despunta también el montaje creativo y abstracto en sus saltos temporales finalizando dignamente la saga.
Para finalizar, la considero una obra estupenda que da un final merecedor de ser visto por los seguidores de la saga y del género de ciencia ficción y viajes en el tiempo, aunque eso sí, es la menos brillante de toda la trilogía. Recomendable por su dirección, guion, actuaciones, fotografía, música, montaje, efectos, movimientos de cámara, vestuarios y caracterizaciones que hacen de Regreso al futuro III, un film de visión obligada para los incondicionales de la historia en cuestión.

Tercera y última entrega de ''Regreso al futuro''. Cerrando de forma magistral la trilogía futurista en esta ocasión cambia bastante de registro, trasladándonos al salvaje oeste. Tras dos entregas donde se explotaba, en cierto modo, la idea de viajar adelante y atrás en el espacio-tiempo se necesitaba algo distinto, algo diferente, y como resultado tenemos una tercera entrega que no abusa de la máquina, sino de los sucesos en el oeste.
Como todos los fans sabrán a lo largo de la segunda había momentos donde ya dejaba claros los pasos que seguiría la franquicia, y personalmente creo que la han sabido cerrar muy bien. Lo hacen homenajeando al western, un género que, por aquel entonces, aun no se veía tan lejano y contiene grandes referencias a hitos de dicho género, especialmente a la trilogía del dólar de Clint Eastwood, sobre el que se permite varias licencias.
La trama continúa donde lo dejó la segunda, enlazando perfectamente todas las partes como si de una sola historia se tratase. Es más que obvio que se necesita haber visto las anteriores para seguir el hilo narrativo de esta, aunque como homenaje funciona por sí sola. Decir que se hace entretenida en todo momento, sobre todo si te gusta el western, ya que la disfrutarás un poco más. Como decía el estilo narrativo cambia, dejando un poco apartado el tema de viajar todo el rato en el tiempo y asentándose en un mismo lugar el 90% del metraje. Esto sirve para sentar los acontecimientos, haciendo que el espectador se sienta como parte de este salvaje mundo habitado por bandoleros, pistoleros, ajustes de cuentas y caballos. La idea funciona bastante bien, se siente fresca y se incluye muy bien en una saga futurista.
El reparto repite una vez más, confirmando de nuevo que encajan perfectamente en los personajes que desempeñan. Michael J. Fox y Christopher Lloyd ya son Marty y Doc respectivamente, pero no solo en la ficción, sino que sus personajes los han adaptado tan bien que no los vemos en otros actores ni en sueños. También repiten otros actores y actrices carismáticos de la franquicia, pero el pilar base ya sabemos quienes son. Aquí le dan más protagonismo a Doc y también profundizan un poco más en todo lo que le rodea. Me ha gustado esta forma de cambiar el enfoque, en cierta manera, de lo que habíamos visto en sus dos predecesoras.
Para casi todo el mundo esta tercera parte es la más floja de las tres. Bajo mi punto de vista también lo creo, las cosas como son. Está un escalón por debajo tanto de la primera como de la segunda, a niveles generales, pero no por ello se vuelve mala o floja. Para nada. Es una secuela más que digna que cierra toda la historia de un modo correcto y no se nota una transición apresurada ni demasiado rápida. ¿Que está por debajo en términos de calidad? Posiblemente, pero la diferencia no es tan abismal como la pinta la mayoría del público.
En resumen ''Regreso al futuro 3'' es una película entretenida que cierra el círculo de una trilogía mundialmente conocida y, además, épica. Sobre los rumores de una cuarta, infundados todavía a día de hoy, creo que no sería correcto. No solo por la enfermedad que padece Fox, sino porque creo que está bien como está. Ver estas cosas con CGI actual sería una gozada, pero, sinceramente, creo que su tiempo ya pasó y es mejor dejar las cosas como están; que por otro lado están muy bien así.

Lo mejor: Es entretenida, los homenajes al western, enlaza bien con las anteriores y que cierra la trilogía de un modo correcto.
Lo peor: Está un poco por debajo de sus dos predecesoras en términos de calidad.

* Un 6 *

El viaje en el tiempo llegó a su fin.
Lo que empezó como una aventura inocente del chico que nunca llegaba a su hora, pasado el tiempo, se convirtió en una odisea a través de futuros alternativos y pasados reescritos, que hizo de Marty el náufrago temporal por excelencia, pero también le permitió arreglar una existencia con complicaciones.
¿Pero qué pasa con Doc, el amigo eterno y cómplice de todos los períodos? ¿Consiguió él borrar las complicaciones de su futuro?

‘Regreso al Futuro III’ quiere contestar a esta pregunta. Si las anteriores fueron por Marty, esta va por ti, Doc.
La casa de un inventor en 1955 sirve de momentáneo alto en el camino para los viajeros del tiempo. Robert Zemeckis evoca, inconscientemente, el recuerdo de otras aventuras al hacer un recorrido por lo que se dejó atrás, y lo que se quiere recuperar.
El tono nostálgico no es casual: ya hace mucho que 1985 llama para quedarse, porque el viaje temporal no ha sido corto ni fácil. Pero antes, queda la última gran aventura con un Delorean desenterrado para la ocasión.

El Oeste así se convierte en el escenario de la aventura que ya todos conocemos, pero esta vez rindiendo homenaje a la tradición de un género, con sus vaqueros, duelos de saloon y bandidos peligrosos pasados por la ironía sin límites de Zemeckis, homenaje a un grande como Clint Eastwood incluido.
Viejas situaciones se repiten, y conscientes de su propio legado, los personajes exclaman "¿otra vez...?". De nuevo parece que, por muchos años que separen acontecimientos, estos no se salvan de ser repetidos, en el mejor ejemplo del eterno retorno que nadie más podrá enseñar.

Sin embargo, y pese a la autoconsciencia predominante, nadie se ha olvidado de que el centro de todo es la amistad entre Marty y Doc.
Y por primera vez se atreven a jugar con una idea que llevaba sobrevolando desde el primer viaje en el tiempo: ¿y si algo del pasado fuera tan bueno... que no mereciera la pena volver al presente? El Delorean hace mucho que dejó de ser el espectacular artefacto de antes, y ahora solo parece una máquina gris que provoca más problemas de los que soluciona.
Esta vez, de hecho, el elemento a batir es la muerte, representada en la foto a una lápida, y como esta sobrevuela intermitentemente a los dos amigos, precisamente porque no tienen el valor necesario, o tienen demasiada soberbia. Todavía quedaba una última lección por aprender a ambos: estamos atados a lo que el tiempo ha ido haciendo de nosotros, pero en cualquier momento, de igual manera que el Delorean altera la corriente temporal, podemos también dar un puñetazo en la mesa plantando cara a nuestros errores.

El último desesperado viaje del Delorean, propulsado por una locomotora a vapor, tiene más de última oportunidad que aquel viaje de vuelta a 1985, pero solo porque por primera vez esta en juego tanto lo que Marty busca como lo que Doc ha encontrado. Y estos amigos, estos náufragos del tiempo, nunca han estado más juntos como cuando comprenden por qué están separados, sea en 1885, 1955, o 1985.
70 años de regresos al futuro les contemplan, y se cierran con esa sensación agridulce del increíble viaje que no se volverá a repetir.

O sí, porque no había otra manera de dejar a estos dos que esperando su próxima aventura: Marty sin oír la palabra "gallina" desde hace mucho, y Doc haciendo lo que siempre quiso, investigando los dos grandes misterios del universo como eran los viajes en el tiempo y las mujeres.
Y, pese a que la máquina temporal vuelve a salir de la pantalla, buscando llevarnos de vuelta, volviendo a prometer aventuras que no por tensas dejan de ser menos divertidas... el sabor a conclusión es más fuerte que otras veces.

Hasta siempre, Marty y Doc, y buen viaje.

Es un tópico decir que es la más floja de la trilogía.Es lógico que el nivel baje con respecto a las dos anteriores, son espectacularmente buenas.Sin embargo es un broche final espléndido, con todos los guiños a los viajes temporales, un homenaje al antiguo oeste, a Clint Eastwood y momentos divertidos.(8,5...casi 9).
Marty, Doc, Biff...fue un placer !!!