Fin de semana de pesadilla

Más que regulera película ochentera que promete pero que te deja un poco frío.

Tras una primera escena que llama la atención, se nos presenta una historia algo rara, donde un científico ha creado una especie de máquina para controlar a la gente (la idea es controlar la agresividad, pero vamos, es que no va bien en ningún momento). La cosa es que todo es muy raro, hay un ordenador que parece que tiene poderes divinos, que lo controla todo, desde un coche, hasta el tema del control mental, que lo hace ¨transformando¨ un objeto persona de la gente en una bola de metal que ella sola se mete dentro del organismo de la gente a través de la boca y hala, ya se pueden controlar. No tiene mucho sentido, ¿verdad?

El tema es que la gente que se traga la bola acaba transformada en unos pseudozombies mutantes que se cargan a quien pillan por ahí, aparte hay un bar lleno de chulos que solo intentan tirarse a toda chica que ven, y algún personaje más que está ahí porque sí, para tener víctimas de sobra.
¡Ah!, ¿he comentado que también hay una especie de marioneta conectada al ordenador que parece tener vida propia?

Me resultó bastante aburrida y poco interesante, perdí el hilo varias veces del poco caso que le estaba haciendo y hasta me costó terminarla.