El cielo se equivocó

No se por qué, pero siempre me han interesado y subyugado este tipo de películas. Robert Downey Jr. hace su primera gran interpretación y Cybill y Ryan están a la altura. Sé que estamos hablando de fantasías, de ciencia ficción, pero a veces tenemos que ser cómplices de la trama y dejarnos llevar. La trama me hipnotizó. El tema de Cher del final es absolutamente emocionante y la mejor escena es cuando Corinne descubre a su "esposo" cuando el personaje de Robert Downey Jr toca el piano. Imperdible. Soñemos juntos.

Las historias sobre roles cambiados, viajes en el tiempo, paradojas temporales y misterios de ciencia-ficción siempre han ocupado gran parte de mis aficiones cinematográficas. En "El cielo se equivocó" se mezclan ideas de la película "Starman" y "Qué bello es vivir", y, pese al inevitable tufo que desprende de producto para familias felices o época de Navidad, el resultado resulta agradable de ver, si conscientemente has situado el listón a la altura adecuada.

Que no se trata de que nos encontremos con un clásico del cine cada dos por tres tampoco...de vez en cuando hay que disfrutar de lo horrorosamente "comercial" y dar descanso a nuestras células grises, como diría el gran Hercules Poirot.

Una aséptica historia no apta para personas con un ego superior. La película no despide tufo por ninguna parte, alguna crítica sí que lo despide. Esto no es ciencia ficción, porque no habla de ciencia, es el tema del limbo, del Cielo o del Más Allá. Ni se quiere alcanzar la felicidad viendo la película pues sólo pretende distraer para pasar el rato. Es que es la repanocha, ¿por qué la gente tienen tantos prejuicios cuando se toca el tema celestial? Ya con el título debería uno darse cuenta y saber, además, que aceptando la propuesta, el argumento es verosímil.

Ya en A vida o muerte (1946) se presenta el cielo como un ministerio en toda regla, tenemos también otros ejemplos más directos en El cielo puede esperar (1978), El difunto protesta (1941) o El diablo dijo no (1943) en la se presenta una situación similar pero con un diablo de recepcionista. Puede que haya otras películas del estilo pero como aún no llevo quince mil películas vistas, ni siquiera ocho mil, pues se me escapan por ahora.

Pues bien, con El cielo se equivocó ves al señor Downey Jr. nada menos que con Cybill Shepherd y el mismísimo Rayn O´Neal. Te das cuenta ahora de las razones de que hoy día sea una estrella consolidada. Cybill junto a Faye Dunaway, por ejemplo, eran muy populares en el cine y en la televisión por sus innumerables apariciones; todavía me acuerdo de Cybill en la serie La rosa amarilla, junto con Sam Elliot y David Soul, el Hutch policía. Cybill está infinitamente más atractiva que la señorita Masterson, desde luego. Espero que se comprenda; la edad aquí es un grado. Y Rayn O´Neal está simpatiquísimo.

En conclusión, una complaciente comedia sin aspiraciones, por lo que tiene su valor, ya que las aspiraciones no son más que meras ilusiones, como el que quiere disfrutar siempre de algo más.

Película recomendable para todas/os aquellas/os amantes de las comedias románticas. Los admiradores de Cybill Shepherd (Luz de luna) o Ryan O'neal.

Hace poco que la visioné en un pase para televisión, tenía constancia de haberla visto hace tiempo, pero apenas la recordaba y la verdad es que me gustó. El tema de la reencarnación, el tener una segunda oportunidad con ese amor perdido hace tiempo. Muchas casualidades y enredos para este melodrama dirigido por el desaparecido director de Dirty Dancing, Emily Ardolino y en el que podemos ver además de los adultos Ryan O´Neal, Cybill Shepherd, a caras jóvenes (en aquel momento, claro está) como Robert Downey Jr. en un buen personaje y una guapa Mary Stuart Masterson (todavía la recuerdo como la Watts de Una Maravilla con Clase, aquella cinta de aire adolescente, a lo John Hughes y además, de participar en la dramática Tomates Verdes Fritos). Como casi siempre, Christopher McDonald luciendo un secundario que, a pesar de no salir mucho, se nota su presencia en pantalla. Si no la habéis viosto nunca, dadle una oportunidad, creo que os gustará.