Perdóname, Señor (Serie de TV)

Sí.

'Perdóname, señor' representa la lacra de la ficción televisiva española. ¿Cómo pueden seguir llegando este tipo de series tan mal escritas, tan mal rodadas y tan mal producidas a un canal tan potente como es Telecinco?

Iba a pasar de escribir nada, pero me parece que cualquier aficionado a la ficción debería sentirse muy ofendido.

Ya no digo nada a nivel profesional.

Me gustaría poder salvar algo, ver una luz al final de un piloto oscuro. Pero es imposible. En mayor o menor medida la ficción española en televisión en abierto estaba intentando rascar una originalidad en algún sitio: Vis a vis, El ministerio del tiempo, La casa de papel, Sé quién eres... Dentro del marco al que nos han querido acostumbrar como espectadores las todopoderosas cadenas, al menos, buscaban crear un referente, intentar algo que no se había intentado aquí.

'Perdóname, Señor' es un (gigantesco) paso atrás.

Es una pena que aparezca algo así en un momento en que parecía que la ficción española traía un poquito de frescura.

Con las producciones de Mediaset, al igual que con las de Atresmedia, uno tiene siempre una cierta reserva, pues sabe a lo que se enfrenta: mucha publicidad, mucha apariencia, conocido (y guapo) reparto, tramas simples y poco complicadas (si bien con alguna vuelta de tuerca a veces inesperada) y en conjunto bajo nivel, tanto de calidad general como de las actuaciones de actores y actrices. Ah, y no son precisamente baratas.

Nunca suelen ser especialmente originales, pero en este caso, "Perdóname, Señor" es un peligroso cóctel de "El Niño", "El Príncipe", "Sin tetas no hay paraíso", "Mar de Plástico" y alguna gota de "Grupo Siete" o "El Pájaro Espino". Contrabando, pescadores, drogas, guardias civiles, monjas de turbio pasado, costa gaditana, gángsters franco-árabes...¿alguien da más?

No ayuda que uno de los papeles protagonistas recaiga en Jesús Castro, pésimo actor que cree que con sus ojazos tendrá para toda su carrera y que vuelve a interpretar por enésima vez a un choricete ligón con moto que trapichea en el contrabando. Paz Vega nunca ha sido una excelente actriz, ya vemos lo que ha triunfado en Hollywood, pero estuvo creíble cuando hizo de Teresa de Jesús; aquí haciendo de monjita no lo es tanto. Sorprende la presencia de nombres prestigiosos como Antonio de la Torre, sin olvidarse de caras habituales de toda serie ligera que se precie, como Paco Tous o José Manuel Seda (aquí sin embargo destacables los dos) o Andrea Duro en su ya clásico papel de chica explosiva y avispada. Por otra parte, interesante el papel de la lumi de "Grupo Siete".

Por lo demás, bonitos paisajes y escenas a lo "La isla mínima", diálogos forzados, mucha música moruna sin venir a cuento y tics típicos de Mediaset. Se deja ver y tendrá buena audiencia, pero no llega al aprobado.

Llevo 15 minutos de episodio....no doy crédito a lo que estoy presenciando....
Me da igual todo lo criticado de que se parezca a una u otra cosa o que si es realista o no; si yo veo una serie de ficción ya sé que es ficción y no un documental, me parece perfecto que se haga algo igual a lo que ya ha funcionado o que la guardia civil utilice monopatín volador....ese tipo de cosas son secundarias.

Lo que me ha dejado aun traumatizado es semejantes diálogos, encima en boca de actores que no son precisamente novatos...parece un texto de teatro de fin de curso o visualizar el videobook de alguien recien graduado de la RESAD... unas frases...un forzado...parece un ensayo de misma serie, pero uno de madrugada cansado y sin ganas....no tengo palabras....
Voy a hacerme una sopa de sobre, la necesito.

Iba a escribir una critica currada, lo juro, pero después me han empezado a venir a la mente escenas de la serie interpretadas por Jesús Castro y directamente he recapacitado. Esta serie (mala) que tiene como protagonista a este sujeto (pésimo) no merece que pierda mi tiempo en escribirle más de 3 líneas. ``Perdóname, señor, por haberla visto´´

De la mano de Telecinco nos llega una especie de remedo de "El Príncipe" (2014), aunque si se piensa un instante tampoco es que se parezca demasiado. Aquí en "Perdóname, Señor" han cambiado Ceuta por Barbate (Cádiz) y el terrorismo islámico por el narcotráfico. En realidad se asemeja más a "El Niño" (2014). En cualquier caso recupera de "El Príncipe" a Stany Coppet y a Jesús Castro, pero la que lleva el protagonismos es Paz Vega haciendo de monja con un pasado "oscuro". En total son solo ocho capítulos así que no se hace nada larga pero esto hace que argumentalmente vaya un poco limitada.

Confieso que empecé a verla sin mucho interés así que la sorpresa fue grande cuando descubrí en el reparto a la hermosa Andrea Duro. Ahora bien, su personaje es limitado, pequeño y en el fondo intrascendente a pesar de contar con muchas posibilidades: Claudia, una mezcla de prostituta de lujo y relaciones públicas. En realidad se limita a pasearse por la pantalla y de hecho su conato de trama acaba desapareciendo. El resto de la serie ni muy bien ni muy mal. Pese a ser poco imaginativa se deja ver aunque el final no es que sea muy boyante, con alguna muerte cruel que veía venir (SPOILER).