Las ratas del desierto

Por favor, no se tomen el título de esta crítica al pie de la letra. A continuación intentaré aclarar lo que he querido decir.

Por aquellas épocas ya existían las grandes producciones bélicas que daban gran importancia a un buen guión al estilo clásico, es decir, un grupo de hombres que se ven obligados a desempeñar misiones suicidas y entre los que, por unos u otros motivos, surge una gran camaradería.
Pero en esta película falla algo, no nos identificamos con el grupo. Y no es porque hayan mezclado "aussies" con ingleses, sino porque los personajes no están bien trabajados. Aparentemente las situaciones son interesantes y los actores más o menos adecuados, pero eso de encontrarte en plena guerra con tu profesor de la infancia suena a falso, al igual que las numerosas conversaciones entre éste y su antiguo alumno. En general, falta nervio y auténtica tensión.

Y ahora explico por qué digo que es "cine bélico de serie B".
En primer lugar, creo que abusa de explosiones. Lo mejor es la primera batalla durante la tormenta de arena, pero, a medida que avanza la película, se repiten los bombardeos; parece como si se hubieran gastado la mayor parte del presupuesto en conseguir explosiones espectaculares y tuvieran que amortizarlas al máximo.
Por otra parte, la voz en off que utiliza para acelerar la narración cuando le interesa es típica de la serie B de esos años. Pero en este caso, teniendo en cuenta que en total sólo son 90 minutos, aproximadamente, podrían haberse extendido un poquito más (sobre todo si tenemos en cuenta que podrían haber recortado muchas explosiones), evitando así la artificialidad al escuchar a un desconocido relatar las supuestas aventuras; incluso podían hacer que lo relatara alguno de los protagonistas.
(Ver spoiler.)

He querido aclarar esto para que nadie se piense que me intento hacer el listo, pues sería fácil interpretar que mi intención era calificar a Rober Wise como un director malo sólo apto para dirigir películas de bajo presupuesto. Nada de eso: Wise me parece un muy buen director, pero creo que ésta no es precisamente su mejor película.

Lo mejor de esta película es que ya desde el primer fotograma nos pone en situación. Es rápida y dinámica. A destacar la interpretación de Richard Burton como oficial exigente y expeditivo, sin duda la mejor baza del film. Una lástima lo del alcoholismo, podía haber sido mucho más. Se echa en falta más participación de James Mason como el mariscal Rommel, se queda casi en algo testimonial y para salir en el cartel de la película. Los dos antagonistas comparten una sola escena, bien trabajada por cierto, y donde se muestra que con mayor participación de Mason hubiera ganado todo mucho más. Por cierto, se nota que tenía cogido al dedillo el personaje de Rommel, y que disfrutaba con ello. Sólo para los aficionados al cine bélico que sean capaces de perdonar sus defectos. Al menos muestra a los que resistieron de verdad en Tobruk, los aussies y los ingleses, que por algunas películas parece que sólo intervinieron los americanos.
Es increíble lo de Robert Wise, lo mismo hacía terror, ciencia-ficción, bélico, musical... eso sí que es un todo-terreno.

La película narra las acciones de la Séptima División Acorazada británica, también conocida como "Las ratas del desierto". Deberán defender Tobruk, todo el tiempo que puedan, del ataque del Afrika Korps dirigida por el mariscal Rommel.
Entretenida e irregular película de un notable director como fue Robert Wise. Con un buen sentido del ritmo Wise nos ofrece buenas secuencias de combate mezcladas con el Cuartel General del Mando donde se organizan y dirigen los planes para contener los panzers de Rommel. Hasta aquí todo bien. El problema viene principalmente por las insólitas conversaciones entre el capitán McRoberts y su antiguo profesor de colegio. Sobran. El intimismo en este tipo de películas (o en cualquier película) nos gusta, pero cuando viene a cuento y ayuda al desarrollo de la historia. Las interpretaciones, sólo correctas, tampoco ayudan a elevar el nivel de la cinta.

Buena película inglesa sobre la IIª GM. Buena fotografía en blanco y negro, buen reparto, buen ritmo y no llega ni a 90', lo que hace que no pueda hacerse pesada. Nada de escenas romanticonas. En fin, un buen momento de cine para el que le guste las películas bélicas bien hechas. Merece la pena.

"Ratas del desierto" es, ante todo, un homenaje a los militares de la 9ª división australiana que padecieron lo inhumano en la fortaleza portuaria de Tobruk en 1941, en plena campaña africana de la Segunda Guerra Mundial, frente al muy superior ejército del Afrika Korps de Rommel, el destacado general nazi.

Un hecho real, una hazaña bélica con todos los ingredientes para convertirse en una destacada película: inferioridad numérica frente a superioridad, condiciones de supervivencia extremas, calor abrasador del desierto, órdenes casi imposibles de cumplir, todo ello bañado en un manto que roza la épica heróica.

Robert Wise dirige un film bélico aceptable, pero no brillante, teniendo en cuenta lo excepcional de la historia y lo que a priori prometía. Tiene un buen arranque, aunque después no mantiene el nivel, yendo de más a menos.
No profundiza demasiado en los personajes. La relación del capitán con su antiguo maestro no parece muy convincente y la participación de James Mason como Rommel es testimonial, papel que repetía poco después de haber interpretado al general en "Rommel, el Zorro del desierto". La labor de Richard Burton no está mal en su papel de capitán MacRoberts, luego ascendido, aunque hemos visto papeles militares más jugosos.

Uno de los puntos a favor de la película es que explica muy bien desde el principio las estrategias bélicas de uno y otro bando de manera clara y diáfana mediante sencillos mapas, algo simple pero que se echa de menos en otras películas de corte similar. La voz en off, utilizada a modo introductorio, está bien usada y dosificada, aunque la utilización de la elipsis, sobre todo la última, parece muy forzada. Algo prescindible son los insertos de imágenes reales que parecen, por decirlo sin ofender, claramente antiestéticos.

En definitiva, una película que parece más preocupada por ensalzar la épica y glorificar a las tropas que por conseguir unos resultados hitórico-artísticos de primer nivel.