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Eric Clapton. El patrón del blues

Eric Clapton. El patrón del blues
2017 Reino Unido
Documental, Intervenciones de: Eric Clapton
7.0
155
Documental Una mirada a la vida y obra del guitarrista Eric Clapton, muy centrada la crónica de sus años de alcoholismo. Un film contado por aquellos que lo conocen mejor, incluyendo a BB King, Jimi Hendrix y George Harrison. (FILMAFFINITY)
Críticas 3
Críticas ordenadas por utilidad
20 de diciembre de 2018
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Life in 12 bars" (Showtime Documentary Films, 2017) prometía ser la película definitiva sobre la vida y la obra de Eric Clapton, al igual que "No Direction Home" lo puede ser sobre Dylan (al menos sobre una parte muy importante de su historia) o "Living In The Material World" lo es sobre George Harrison, pero la sensación es de enorme oportunidad perdida, pues el despliegue de medios, el notorio trabajo arqueológico que ha servido para documentar el film, no encuentra un resultado final plenamente satisfactorio. Pero claro, es de suponer que Lili Fini Zanuck, directora prácticamente debutante, no dispone de la solvencia de Martin Scorsese, autor de las dos referencias citadas. El documental no recurre a mostrar imagen de los diversos testimonios, salvo cuando son de archivo de la época, sino que recrea situaciones mediante imágenes a partir de fotografías y vídeos, lo cual no siempre ofrece un resultado óptimo, llegando a resultar molesta incluso la reiteración y la parsimonia de algunas imágenes.

Tras un breve paso por su infancia y juventud, con el abandono y la desafección por parte de su madre como epicentro emotivo, no sólo de esos años sino de toda su vida, se entra de lleno en la primera parte de la película, centrada en su capacidad y su evolución artística, su pasión por el blues y sus grandes referentes musicales. La descripción de su paso por las diversas bandas que forman parte de su carrera parece rigurosa y suficientemente detallada, desde The Roosters a Yardbirds, John Mayall & The Bluesbreakers, Cream y Blind Faith, con muy buenos momentos musicales. Los testimonios son sumamente interesantes, desde Mayall a Ginger Baker, pasando por su amigo Ben Palmer, Roger Waters, Stevie Winwood, Tom Down, Bill Graham, BB King (que reconoce la trascendencia de Clapton para músicos negros como él a la hora de dar a conocer su música) o Ahmet Ertegün. No faltan escenas con Hendrix, Beatles, Aretha Franklin, Stones o Dylan, y es que la historia de Clapton es buena parte dela historia del blues rock.
La segunda parte de la película se centra por completo en su vida personal, su amistad con George Harrison su relación con Pattie Boyd y el proceso creativo y autodestructivo de "Layla and other assorted love songs" con Derek & The Dominos y Duanne Allman. El testimonio del propio Clapton, claramente implicado en la ejecución y promoción de la película, y de Pattie Boyd, sirven de inmejorable fuente acerca de lo ocurrido, si bien es una historia ya contada por ellos dos en la película de Scorsese sobre Harrison. Su terrible decadencia en los 70 haciendo especial énfasis en sus adicciones, el accidente de su hijo Connor y, finalmente, su encomiable recuperación y su activismo militante mediante su fundación, son el resto de focos en los que se centra el guión.

Sin carecer de interés, lo cierto es que la película decae en esta segunda parte, se muestra redundante y un tanto morbosa y se olvida por completo de la faceta artística, y aunque es evidente que la obra de Clapton en las últimas décadas no está a la altura de su talento, no lo es menos que hay momentos puntuales de especial relevancia que requieren un adecuado análisis y que se han pasado por alto. Sin ir más lejos, no se hace mención en todo el film a su relación musical con J.J. Cale o con Robert Johnson, a eventos singulares como "Rock & Roll Circus" o "The Concert from Bangladesh", a su regreso en el Raimbow o a discos fantásticos como "Slowhand" o "Promises", y si se hace mención a la gira del 74 es para hacer hincapié en sus problemas adictivos, cuando aquellos años ofrecieron inolvidables conciertos con una extraordinaria banda.

En definitiva, no está nada mal, sobre todo esa primera parte, pero diera la impresión de que la historia podía haber dado un tanto más de sí en la película a la que, desde luego, no le falta metraje.
griffinjazz
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20 de febrero de 2019
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Excelente documental que narra, entretenida y acertadamente, la vida de uno de los mejores guitarristas de todos los tiempos. Su infeliz infancia, su juventud amarga, su paso por distintos grupos musicales, sus éxitos, su adicción a las drogas y al alcohol, su amor por Pattie (esposa de George Harrison), la muerte de su hijo ...... todo ello narrado con fluidez y captando, desde el primer momento, la atención del espectador. Apoyado en abundante material fotográfico e imágenes inéditas es un documental ejemplar.
"Layla" es, en mi opinión, una de sus mejores canciones. Un grito desgarrado. Un dolor agónico. Un amor imposible. En el documental se escucha una pequeña parte de la canción y creo que merece ser escuchada enteramente.
Acomódense en sus sillones. Suban el volumen. Cierren los ojos. Y escuchen. Y disfruten. Son siete minutos de gloria.
elbin
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18 de octubre de 2021
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
No conocía apenas la trayectoria musical de Eric Clapton, tampoco de su vida, por lo que este trabajo es lo suficientemente amplío para iniciarme en el conocimiento de esos dos aspectos. Y paso a señalar los rasgos positivos y negativos del documental:

POSITIVOS:
a) La ejecución de todo el metraje es realmente buena, se aportan muchos testimonios, imágenes de sus colaboradores, de los músicos con los que trabajó. Se emplean los flashbacks en diversos momentos, lo que me resultó innovador si pensamos que estamos ante un documental, de manera que enriquecen la narración. Hay estados anímicos, momentos vividos del cantante, que se recrean a base de suspender la imagen, de pausar la fotografía. Logrado.
b) Es de agradecer la sinceridad de Clapton a la hora de narrar los hechos que acontecieron en la parte más oscura de su vida. Normalmente ningún artista consagrado lo hace, los biopics acostumbran a hacer retratos buenistas de sus protagonistas. Clapton parece querer redimirse, y nos entrega algunos de los más interesantes pedazos de su biografía.
c) El documental, en cuanto a su producción musical, se centra en los 20 primeros años de su carrera. Nos ayuda a revivir el cómo se vivía la música en los años 60 y 70, otra forma de vivirla muy diferente a cómo se hace hoy. Nos cuenta las influencias que forjaron el estilo de Clapton. Independientemente de gustos, el artista dominaba la guitarra como pocos, cuando colaboró con otros compuso obras de gran calidad.
d) El metraje da algo más de peso a los aspectos personales del protagonista que a la música que produjo. Al menos a mí sí me llegó así. Pienso que para Clapton lo más importante era contar su verdad, por encima de logros profesionales en su arte. La parte más oscura de su biografía, que se extendió a lo largo de bastantes años, ayuda a "terrenalizar" al artista. Quizás por eso, algunos críticos "entendidos" critican el documental, siempre vende mejor el idealizar a las figuras que destacan.

NEGATIVOS:
e) Supongo que para un fan del artista faltará mucho material, sobre todo en la parcela musical, a desarrollar. Y no cabe duda de que es así.
f) A partir de los 80, su biografía se resuelve de un plumazo. Y ya todo es bonanza y dicha, fotos sonriendo. Es una resolución rápida y acomodada.


CONCLUSIÓN:

Me quedo con lo que es el grueso de la historia hasta que las relaciones matrimoniales lo estabilizan. Hablamos del 90% del metraje. Lo demás es un redondear la biografía, nada más. También me quedo con el homenaje verbal que le rinde B.B. King.
Una vez más, la vida de un artista de éxito tiene un común denominador, acontecen los mismos problemas que en otros casos. Como particularidad, Clapton iba por libre, funcionó desde su autogestión, a diferencia de otros artistas de grupo.
Eric Clapton, respiraba creatividad. Me lo creo cuando dice que a él le bastaba con estar todo el día tocando para ser feliz, no necesitaba los conciertos o sacar discos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
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