Haz click aquí para copiar la URL

La patrulla

Thriller Dos chavales de diez años encuentran un coche de policía aparentemente abandonado y deciden montarse para dar una vuelta. Comienza así un tortuoso y desesperado juego del gato y el ratón en el que la única salida será darle al acelerador y conducir lo más rápido posible. (FILMAFFINITY)
1 2 3 4 5 10 13 >>
Críticas 61
Críticas ordenadas por utilidad
2 de noviembre de 2015
77 de 101 usuarios han encontrado esta crítica útil
Escribo esta crítica bastante cabreado, porque he hecho algo que no debería hacer, y es leer antes el resto de las críticas. Y casi todas dicen lo mismo una y otra vez, "la anécdota no da para tanto y se estira demasiado", y al final lo único que se estira demasiado es la gilipollez que se le ocurrió decir a un crítico sobre esta película, y que un hatajo de borregos repiten como autómatas una y otra vez.

A mí que me digan desde cuándo lo importante es la cantidad de cosas que suceden en una película, para que esta sea mejor o peor. Pongamos a Roman Polanski y una de sus obras, "El cuchillo en el agua", podría decirse la misma tontería: "es que la anécdota se estira demasiado", y así con un sinfín de obras maestras. No, en "Cop Car" la anécdota es perfecta, sintética, heredera de clásicos como "El diablo sobre ruedas", pero con sus peculiares matices, brillos y sombras, un relato de la realidad envuelto en un thriller que, además, cumple a la perfección su cometido.

Dos chavales de pocas luces, criados en el entorno estéril del white trash de la América profunda y paleta, se meten sin darse cuenta en un lío de cojones. A partir de aquí, el relato se desarrolla sin que puedas apartar la vista de la pantalla, pero además se habla de la infancia, de la ingenuidad, del mundo de fantasía en contraste con el real, del proceso de empezar a entender lo que es la vida. Las luces de la ciudad emergen en plena noche, tan precisas y pequeñas, en contraste con los cielos abiertos y azules y las grandes extensiones de campo y la soledad de la parte anterior de la película. En fin, esto es solo un poco de lo que "Cop Car" lleva dentro.

Así que esta película no está "estirada de manera artificial", lo que sí se estiran son las estupideces que a la gente le gusta repetir, esta es una película de un par de cojones, buena de la ostia, con buenos personajes e interpretaciones, honesta, entretenida y que además encierra una reflexión vital sin necesidad de elementos superfluos de ningún tipo.

Y ya está. A rañala, listillos.
Glasshead
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
14 de enero de 2016
33 de 37 usuarios han encontrado esta crítica útil
Son 86 minutos de cine con Mayúsculas. Poco a poco y casi sin que te des cuenta se va armando un thriller que atrapa la atención y desparrama adrenalina en un especie de estilo "tarantinesco".

Un excepcional guión que escribe los diálogos apenas imprescindibles pero muy medidos y creíbles, especialmente en la interacción de los adultos con los dos (formidables) gurises protagónicos; una historia cuyo nudo central no se explica contribuyendo al suspenso. Un pequeño elenco (pequeño por el número, apenas son 5 personajes) de lujo con una brillante interpretación de Shea Whihgam, al igual que Kevin Bacon y una estupenda viñeta de Camryn Manheim (una de las abogadas de la serie "The Practice") que, por ejemplo, en la escena en que busca las llaves en la maleza da una verdadera clase maestra de actuación.

Y ni que hablar de los botijas (verdaderos primeros personajes) James Freedson-Jackson y Hays Wellford, que comienzan puteando y ensayando sinónimos para malas palabras y culminan con una electrizante inocencia en la manipulación de deterninados artefactos que encuentran.

Además, como si fuera poco, un desenlace inesperado y un final abierto. Es un filme seguramente de muy bajo presupuesto, pero de enorme talento. Humilde y fervorosamente recomiendo que vean esta película
Atilio
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de agosto de 2015
19 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
En “Clown”, la que era su primera película como director en solitario tras la coral “Our Robocop Remake”, Jon Watts partía de un tráiler hecho por unos niños perversos que anunciaba una película que no existía como juego personal hacia Eli Roth, convertido en padre involuntario del proyecto. Un juego de niños cuyo resultado final era llamativo, pues el director se veía incapaz de superar el minuto que duraba el propio falso avance.

Con “Cop Car” le viene a ocurrir algo parecido. Su premisa inicial, la de unos chicos que se meten en un lío al robar el coche del sheriff local, podía dar más de sí, pero durante su primera mitad, el film deja la sensación de que esta historia no daba para mucho más que un corto, y de que está estirada como un chicle. En su segundo tramo, la propuesta toma un rumbo inesperado, pero que no acaba de explotar la base sobre la que se sustenta. No se convierte en ese juego del gato y el ratón que uno podía esperar, y el camino que escoge no exprime al máximo la atractiva baza argumental de la que parte.

Básicamente, su problema es el guión. No sólo por no saber sacar partido a su base argumental, sino por otras muchas inclemencias, que van desde el hermetismo en lo referente a detalles decisivos que quedan al libre pensamiento del espectador, como la razón de la fuga de los niños o los asuntos sucios en los que anda metido el sheriff, hasta ciertos momentos forzados, como la irrupción en un punto álgido de la acción de la figura de la conductora. Y sin embargo, supone un salto de gigante en la filmografía de su máximo responsable. Porque a pesar de estos escollos, la película tiene ritmo, entretiene, está bien dirigida y sus actores realizan su trabajo con enorme solvencia, desde los dos pequeños hasta un Kevin Bacon que raya entre lo comedido y lo histriónico.

Un histrionismo que recorre la obra al completo. “Cop Car” está bañada de un malicioso toque de ingenuidad casi infantil, inocente, con ciertas pinceladas de humor negro que recuerdan a los Coen de “Sangre fácil”. Además, en su acto final ofrece una radiografía de la muerte de la infancia y el afloramiento inesperado de la madurez que funciona mejor que todo el abultado metraje de “Boyhood”. Y eso ya es bastante.

A favor: la dirección, los actores, el ritmo, y su toque maliciosamente ingenuo
En contra: que su guión no acabe por explotar la premisa inicial
kubrick_is_alive
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
14 de octubre de 2015
12 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hay muchas películas que deben ser valoradas de un modo más amplio que el habitual, sin quedarse únicamente en una crítica estándar que habla de muchas cosas pero que en el fondo valora únicamente la historia, las interpretaciones y poco más. Desgraciadamente en el cine ocurre como en la vida y no todo puede ser lo justo que desearíamos.
Cuando se valora 'Cop Car', obligatoriamente deben tenerse en cuenta dos características que saltan a la vista:
A) Guión/Historia mínimos - por no decir insuficientes para un largometraje -: En alguna remota población del vasto y desértico estado de Colorado, dos niños encuentran un coche de policía vacío en medio de un campo solitario y deciden llevárselo. Baste decir que el policía propietario del coche, no esta cumpliendo con el deber precisamente y que evidentemente, va a querer recuperar su vehículo a cualquier precio.
B) Presupuesto holgadísimo.
Si partimos de estas premisas, y vemos (y seguro, disfrutamos) la película, es muy posible que acabemos con una opinión más que positiva.
Jon Watts realiza un trabajo inmejorable con lo poquísimo que tiene: Mantener un ritmo, tensión e intriga en constante crecimiento hasta el mismo final. Un ejercicio de cine - insisto, teniendo en cuenta lo pobre del guión -, a mi parecer sublime. Digo sublime porque si le perdonamos los primeros minutos de puesta en escena (quizás algo excesivos, el planteamiento podía haberse realizado con menos metraje), el film consigue cautivar e inmovilizar en su butaca al espectador, manteniendo en constante aumento esa sensación de nerviosismo y de querer saber qué ocurrirá, hasta su punto final. Muy buena fotografía (aunque las localizaciones de Colorado ayuden). La interpretación en películas de este género y en este tipo de papeles del ya veterano Kevin Bacon es impecable y vale decir que los dos chavales hacen un papel convincente y divertidisimo.
A partir de aquí, habrá mil opiniones como digo yo 'grises': Que si "Kevin Bacon siempre haciendo de malo", que si "Qué mediocridad, apenas hay guión", que si "La película no tiene mensaje", etc. Pero vamos a ver señores críticos, a mí no me veréis opinando de "Memorias de Africa" o de "Gandhi"... Que esta película es un thriller angustioso con algo de sabor de esas pelis de los 80-90!! Si no te gustan este tipo de pelis, pues no la mires!! Que sí te gustan? No te la pierdas porque te gustará!!
Seamos francos, estamos claramente ante una película de serie B (incluso C si se quiere) pero realizada con mucha profesionalidad y acierto. Jon Watts ya apuntó maneras con Clown y para mí, con Cop Car, sube el listón. Habrá que seguirlo de cerca.
El cine, son muchas cosas pero yo pienso - y necesito - que fundamentalmente, en su esencia, sea entretenimiento y la verdad es que en este aspecto, Cop Car entretiene mucho y además, con maneras.
jomaher1971
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
26 de noviembre de 2015
10 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Dos niños en un pequeño pueblo rural sin nada que hacer encuentran un coche de policía en medio de una llanura. ¿Que deciden hacer? Obviamente llevárselo de paseo y jugar con todo lo que encuentran dentro. Con esta premisa el director Jon Watts desarrolla esta comedia negra a modo de juego del gato que caza al ratón en la que el sheriff corrupto interpretado por Kevin Bacon se asegurará de recuperar su coche, ignorante de que los ladrones son un par de críos sin nada mejor que hacer que robar un coche. Es una idea simple que no engaña a nadie, pero está ejecutada de un modo muy natural, inteligente y con un estilo fantástico. Watts realiza la historia una veces con un tono a medio camino entre el drama y la comedia, y otras entre la comedia y el terror, especialmente en aquellos momentos en los que vemos como los niños juegan muy irresponsablemente con todo lo que encuentran en el coche, o viendo como Kretzer actúa igual de negligentemente, pero por motivos bien diferentes.

Jon Watts ya había realizado un interesante ejercicio de terror con “Clown” (2014), una película que utilizaba bien los recursos del género pero que, igual que la película que estamos comentando, daba la sensación de que se podría haber sacado más provecho a las situaciones. Con “Coche policial” el director cambia de registro utilizando en esta ocasión los recursos que ofrece el thriller con más soltura que en su trabajo anterior. Puede que le falte terminar de encontrar un guión que sepa sacar más fruto de sus ideas, porque por todo lo demás nos encontramos con una película con una visión particular de un director que demuestra tener cosas que decir. Con todo, muy recomendable.

Lee la crítica completa en: http://reelsofcinema.com/critica-coche-policial/
xoubara
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 4 5 10 13 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow