Después de explicar numerosos hechos reveladores sobre la religión, como que en la biblia se relatan muchas leyendas y mitos que no sucedieron de verdad (especialmente demoledor es el descubrir que Noé realmente no construyó un arca para meter a los animales de dos en dos), nos desvela cómo todas las guerras y terribles sucesos del siglo XX son fruto de una gran conspiración de los banqueros.

Hasta ahora nunca me había imaginado que el dinero que se invierte en financiar una guerra va a parar a manos de gente que se enriquece con ello. Es más, ese dinero, emitido por el banco central, no hace más que engordar los bolsillos de los jefes de esta entidad. Del todo esclarecedor.

Creo que en el documental se olvidaron de otra de las grandes conspiraciones de este siglo, y que espero puedan tratar en el futuro en otro ensayo de himbestigación. Se trata de la gran conspiración inmobiliaria, y con la que en España hemos convivido desde que aprobamos la Constitución. Sin que se nos avisase, se introdujo una cláusula en la que se dice que todos los españoles tenemos derecho a la vivienda, sin ser conscientes que esto sería el principio de nuestro fin.

Ahora vemos las oleadas de gente manifestándose por no poder ejercer este derecho fundamental, y los grandes esfuerzos que hacen las familias por conseguir hipotecarse. Claro está, que este es un gran plan diseñado por los banqueros para conseguir que todos nosotros nos veamos endeudados y consigamos aumentar la riqueza de los jefes de los bancos centrales. ¿Cómo harían esto no sin haber influído de manera directa en los encargados de redactar la Carta Magna?