El otro día comentaban unos amigos:
- “¿¿¿Por qué no se puede votar 0???”, a lo que le respondió el otro.
- “¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¡¡¡¿¿¿Por quéeeeeeee???!!!...”

Y después de ver está película entendí perfectamente su queja.

Si, si…..lo tengo que confesar….lo admito…. la he visto!!!!
La persona que lea estas líneas se quedará sorprendido, no comprenderá el por qué, e incluso habrá quién se habrá echado las manos a la cabeza o simplemente creerá que soy de ese tipo de personas…..de ese gentío a los cuales no les importa lo más mínimo el daño que se le pueda estar causando a su cerebro.
O sencillamente que la última vez que tuve neuronas en mi cerebro, una de ellas se inmolo y se llevo a todas por delante.
Pero siento defraudar…. mis verdaderos motivos, y sobretodo hay una razón principal que me ha llevado hasta este estado de demencia.
Es que gracias a esta serie, los miércoles por la noche han cambiado por completo, ya no me quedo viendo tonterías en la tele, haciendo zapping como loco. A partir de la genial idea de programar esta serie los miércoles, ahora simplemente, es poner un instante a la chica esa, y comienzo a roncar como si la vida me fuese en ello, como si no hubiera dormido en días.
Gracias a esta serie, el miércoles es el único día de la semana que duermo las horas aconsejadas. Consigo por fin que mi cuerpo descanse, y de este modo estar preparado para otro magnifico día de curro.
Soy incapaz de aguantar más de cinco minutos a la chica esa, su nombre lo desconozco pero sabréis de quién hablo cuando os especifique que es la “chica del camisón”, la que viste y calza, que se pasea en camisón durante toda la serie. Le da igual que sea de día o de noche ¡ella en camisón!, o ya puede estar en la calle o en su casa antes de irse a la cama ¡ella en camisón!.
Hubo un día que realmente me picó la curiosidad, y quise mantenerme despierto para poder juzgar el contenido de la serie. Pero aún habiendo consumido kilos de anfetas, fue imposible…. Si es que con esas pintas realmente lo que apetece es dormir, da más sueño que una cesta de gaticos al lado de la estufa.
En lo poco que aguante despierto comprobé, que es el personaje más ñoño del mundo. Y no por hablar de los supuestos fantasmas que aparecen, supuestos porque ni dan miedo, ni angustia, ni pena, ni asco.
Es incapaz de transmitirme ningún tipo de interés, solamente somnolencia, así que si hay alguna persona que tenga problemas para dormir, no lo duden y vean esta serie. Cura el insomnio desde la primera dosis.