Esto es lo que me aportó Funny Games: nada. Recomendada por muchos como una obra maestra, a mí me pareció una auténtica farsa. No sentí compasión por los vecinos de la casa, ni asco por los que entran en ella. Creo que es la película "de culto" con la que he sentido menos empatía. Ha pasado por mis ojos como una simple sucesión de imágenes, nada más.

Shyamalan siempre juega con el espectador en todas sus películas. A veces logra un resultado positivo ("El Sexto Sentido", "El Bosque"), y otras ocasiones consigue que salgas del cine con la sensación de que te han estafado, como en este caso. "El Incidente" es una película llena de actuaciones bochornosas, con un argumento que se pierde en sí mismo y una factura que ni atrae ni sorprende. Me ha decepcionado.

Por mucho que lo hayan intentado Seven es irrepetible. Desde que salió a la luz ha sido un modelo a seguir por quienes han querido crear una película de este género. El film de Fincher ha marcado un hito en la historia del cine, ha encumbrado a actores como Brad Pitt y ha dejado el listón muy alto. Su desarrollo es sobrecogedor, su estética aterradora y oscura. Es de esas películas que te incomoda, pero aún así no puedes apartar la vista de la pantalla. En resumidas cuentas, todas las buenas películas de asesinos en serie realizadas después de Seven han bebido de las fuentes de Seven. Y eso dice mucho.

Quienes sientan algo especial al ver en la pantalla a Liv Tyler es obligatorio que vean y disfruten de Belleza Robada, una película hecha a la medida de una actriz que se siente querida por la cámara y rodeada de excelentes compañeros de reparto (en especial de un gran Jeremy Irons), inmersa en unos bellísimos paisajes italianos, y con una banda sonora de fondo en la que se dan cabida a temas actuales y música clásica, siempre en consonancia con el desarrollo del film. En resumidas cuentas, una película bella por los cuatro costados, dulce y amarga a la vez, hipnotizadora y muy visual, en la línea de Bernardo Bertolucci.