Creo como mucha gente, que sin dudarlo Eastwood es uno de los pocos y grandes directores que puede conmocionar al público contando una pequeña historia, de una manera que, como por arte de magia se agranda infinitamente, estas palabras pueden sonar muy abstractas, pero se sintetizan fácilmente con películas como esta.
Si bien sabemos que Clint ha sido etiquetado innumerables veces como un creador de cine "social", después de ver Gran Torino podemos afirmar que de cierta manera, sólo intenta "socializarnos" o por lo menos no perder ese comportamiento que nos hace tan humanos, defendiéndolos a ultranza, aunque luego nos critiquen por ello, como le ha pasado muchas veces al director de esta película.
En este filme no destaca por una forma efectiva de la técnica cinematográfica, ni tampoco un guión alucinante como nos tiene muy acostumbrados el cine últimamente para darnos algo relevante, tan sólo una pequeña "idea" y una gran dosis de sentimiento, de "forma", es lo que le hace falta a esta película para introducirnos completamente en ella. Otra obra maestra de este sabio del cine ... muchas gracias señor Clint Eastwood.