...en el que los buenos buenísimos son las mujeres, las lesbianas, los homosexuales, y los "racializados", correspondiendo los papeles de los malos malísimos a los varones heterosexuales, que si son negros al final de la película se cambian de bando.
En fin, otra bobada protagonizada por Charlize dentro de la transversalidad de género tan de moda, que confunde la igualdad de derechos con la igualdad de capacidades.
En cuanto a las escenas de lucha… Más de lo mismo, por poco creíbles.

Otro intento de empoderamiento femenino por imitación del masculinísimo
No perdáis el tiempo. No merece la pena ver otro torpe e increíble (de no creer) manejo de la violencia simplemente por intentar poner a la mujer a la misma altura del hombre. Por esta vía es difícil que lo consiga.
Malas actuaciones y pésimas escenas de acción.

Notable serie… Y muy real. Sin excesivo maniqueísmo aunque, obviamente, prima algo más el punto de vista judío. Aun con todo, dicho punto de vista judio, lejos de autocomplacerse, muchas veces se hunde en el fango de lo humano dejando muy palpable que el conflicto no tienen fácil solución.

Las escenas de acción son muy reales y están muy bien realizadas, sin excesos ni aspavientos.

Muy recomendable.

No es nada del otro mundo, pero se deja ver.

Desde luego es más fiel a la realidad (de la guerra) que la mayoría de las "americanadas" sobre la guerra de Afganistán (o cualquier otra guerra), sin el más mínimo atisbo del glamour con el que los "yanquis" suelen engañar en sus producciones bélicas.

No hay excesiva acción pero tanto las escenas del combate en población, como el derribo del caza, están muy bien filmadas.

Tampoco se esconde la corrupción del ejército ruso, desde los soldados rasos, hasta los generales, lo cual indica que no tiene carga propagandística.

Lo dicho, se deja ver.

Una hora y tres cuartos en la que lo más terrorífico es la Johansson de choni con cuatro frases en toda la película.

Una hora y tres cuartos en la que lo más dramático es el joven con síndrome de Proteus (o algo parecido).

Una hora y tres cuartos en la que lo más científico es la Johansson descubriendo que no tiene "cuca".

Una hora y tres cuartos en la que lo más extraterrestre es un maniquí de costura que en un minuto queda carbonizado.

Una hora y tres cuartos en la que lo más parecido a una "película de culto" son los créditos.

Es alucinante la cantidad de esnobismo que hay entre los críticos de cine, especialmente entre los "profesionales".

Si no os lo creéis… Vedla, ya me contareis.