Al contrario que muchos directores, Hillcoat, en "The Road", maximiza los esfuerzos en adaptar a la gran pantalla de manera casi exacta esta magnífica novela de Cormac McCarthy. Porque cuando tienes entre las manos un gran guión, ¿Por qué jugar con él a ser un director travieso? ¿Por qué ese intento de demostrar poderío imaginativo? Algunos directores, puede que se consideren tan importantes como para estar por encima de una gran obra literaria, y ahí es cuando viene el problema, necesitan enormemente dejar su sello o darle a la obra un enfoque más comercial y palomitero, que el dinero también es muy importante.

Por suerte, Hillcoat no intenta nada de eso. Todo es como el lector se imaginaría ese mundo apocalíptico y gris en el que el escritor sumerge a sus protagonistas y al mundo en general. La labor de fotografía, como bien dicen los críticos y muchos aficionados, es magistral, y vital para recrear dicho mundo.

Con respecto a los actores, Viggo Mortensen muestra perfectamente el sufrimiento de ese padre por sacar adelante una vida en este mundo decadente, cueste lo que cueste, la única razón por la que sigue en él. Charlize Theron, en sus breves apariciones, cumple de sobra con el papel de madre temorosa y sin esperanza ante lo que viene. Y por último, el gran descubrimiento, Kodi Smit-McPhee, con una actuación muy creible y que emociona, mostrando en todo momento las preocupaciones y sentimientos tan dispares de un niño que nace en una situación tan desoladora.

Pese a que esta novela se publicó en su país de origen en el año 2005, no llegó a España y otros países hasta el 2008. Su director, "Niels Arden Oplev", rechazó en una primera ocasión la oferta por adaptar esta novela a la gran pantalla. Era el año 2008 ya, y la obra estaba a punto de ser un fenómeno mundial. Pero, Niels Arden Oplev, no era consciente de ello, ni siquiera la había leido. Medio año después, la obra ya era un boom, y el director fue contactado otra vez para adaptarla, y esta vez si aceptó, incluso la leyó, aunque no con gran dedicación. En fin, no hace falta ser Sherlock Holmes ni tener su capacidad de deducción para saber lo que ha ocurrido aquí y los intereses por los que el señor Oplev se ha movido.

La segunda prueba de esto, la encontramos en la película. Ante todo, tengo que decir, que no me parece nada mala, ya que sabe captar y recrear perfectamente los escenarios en los que se desarrolla la novela, sobre todo ese municipio de Hedestad con su inquietante isla de Hedeby.

Los actores están muy bien. Michael Nyqvist cumple con lo que le toca, aunque le podía haber tocado algo más, no en cantidad, sino en calidad. Y Naomi Rapace está genial, de hecho, Lisbeth Salander me parece el único personaje que se ha adaptado casi al nivel de la novela.

El problema viene en la historia. Los lectores de la novela, encontrarán una falta de construcción de los personajes atroz, debido a la omisión de situaciones que el director creyó superfluas por su escasa acción, pero que daban personalidad a los protagonistas. Además, se cambian algunos hechos importantes sin venir a cuento. En cambio, los no lectores de la novela, encontrarán una historia que avanza rápido y ante la cual se pierden en determinados puntos, ya que omite hechos y situaciones vitales para la comprensión de los sucesos. Se quieren contar las 620 o 630 páginas de la novela en 2 horas, y claro, para ello decide incluir todos los momentos de tensión y/o acción, prescindiendo de todo lo demás...que puede que fuera más importante.

El resultado, una película que, para mí, no debería contentar ni a lectores ni a no lectores. Le doy esta nota por la buena recreación de los escenarios y por los actores principales y algún que otro secundario.