Fuimos a verla en familia, yo tenía 13 años, nuestra intencion era ver la peli e ir a cenar a algún lugar, lo que pasó , fue que el final nos revolvió tanto el estómago a los cuatro, que nos quedamos sin rabas...

Con el paso de los años la fui apreciando de otra manera.

Pelicula sin pelos en la lengua, tema muy actual, hay muchos niños en estas situaciones, aunque el resto del mundo no se de cuenta de lo que pasa dentro de los hospitales.

Película muy necesaria y muy bien tratada.

Hacía mucho tiempo que no reía tanto, sales del cine con una sensación de plenitud y satisfacción.
Los 97 minutos de pelicula me los pasé de carcajada en carcajada sin poder parar.
Grande Juancarlitros