La he revisitado hace poco, y es una de esas que ha mantenido intacta su magia con los años. Lo mismo que te fascinó de chaval, sigue ahí. Y no solo eso, sino que es una película muy disfrutable para quien no la haya visto en su día o no este ni siquiera iniciado en el cine ochentero, y le guste simplemente el género fantástico. Por supuesto, es necesario ubicarla en el tipo de cine que vas a ver, no vas a ver ninguna película histórica, ni de ciencia ficción dura, si no una fantasía, y has de aceptar sus premisas y no empezar a buscar los tres pies al gato. Y vaya si se disfruta, en ningún momento decae la atención del espectador, la historia fluye con flashbacks muy bien llevados, la ambientación es perfecta, y los actores encajan como anillo al dedo en sus papeles. Por cierto que Clancy Brown como el malo (El Kurgan), está brutal. La banda sonora le hace ganar enteros, esta es una de las pocas películas donde una banda sonora cantada por una banda de rock está perfectamente fusionada y compenetrada con la película, colocada en primer plano y no como música de fondo, sin que chirríe en ningún sitio. Tiene mucho que ver con ello, el que Queen escribiesen las canciones después de visionar la cinta y basándose en ella. Los Inmortales merece por derecho propio un lugar de honor en el cine fantástico ochentero, junto a los Goonies, Cazafantasmas, Hellraiser, Regreso al futuro, Labyrinth y tantas otras. Peli ideal para ver en un proyector en pantalla grande con el sonido a tope.

Si quieres morbo y manipulación emocional, pasa y disfruta. Si quieres informarte objetivamente sobre todo lo que rodea a este asunto, hay cientos de fuentes, webs, videos, que te servirán. Esto no sirve para eso. Está destinado a lapidar a Allen y a construir una mentira, la de Mia Farrow. Porque está más que demostrado que urdió una mentira y la introdujo en la vulnerable mente de su hija de 7 años. Y no lo digo yo, lo dice su hijo Moses, que tenía 15 y estaba presente, y lo dice la investigación pública del hospital de New Haven, especializado en abuso infantil. Y esa es solo la punta del iceberg de todas las pruebas que existen contra Mía. El documental toma el camino más cómodo y fácil, y la todopoderosa HBO también. Usan musiquita de terror para manipular las emociones, te ocultan información deliberadamente (y hay pruebas de gente que iban a intervenir y no les dejaron porque era exculpatorio para Allen y acusador para Mia), y apoyan una de las versiones, precisamente la que no se sostiene por ningún lado, y la que cuenta con todas las pruebas en contra. Basura en estado puro. Prescindible, no lo veas. Este es un caso donde existe mucha información, y si no la posees te podrá colar una mentira. Y para informarse hace falta hacer un esfuerzo de búsqueda que lleva tiempo, algunos teníamos el trabajo hecho antes del docu, por eso no nos la cuela. Prescindible y asquerosa apología del maltrato infantil.