Antes que nada, quiero recalcar que personalmente estoy abierto y acojo de buen grado esta remesa de remakes y live actions en los que está inmersa Disney (siempre que estén bien hechos) así que, si eres un hater, te animo a que busques otra reseña, porque esta no te servirá.

En Cruella a Disney le ha salido cara y no cruz como en otros remakes que no pudieron decepcionarme más (Mulán, La dama y el vagabundo...). Con esta película, en mi opinión, han seguido la estela de Aladdin, la Bella y la Bestia, el rey león, etc. lo que me hace preguntarme por qué no se esmeran tanto en hacer todos ellos (lo de Mulán me dolió en el alma).

En la historia nos explican el pasado de una de las villanas más carismáticas de las películas que recordamos de nuestra infancia, con algún que otro cambio en el guión, muy propio de estos remakes, que considero que actualiza acertadamente al personaje y lo acerca al espectador, provocando que empaticemos con ella.

Emma Stone está magnífica, al igual que Emma Thompson, en un duelo de "reinas de la moda" que no nos dejará indiferente, nos guste o no el tema. Los dos lacayos que acompañan a Cruella a lo largo de la película nos recordarán por momentos a aquellos dos malvados de la película de animación (aunque también les han dado una vuelta), al igual que otros guiños como la camioneta, el coche y la forma de conducir de la protagonista y otros detalles que no revelaré, aunque recomiendo no quitar la película una vez aparezcan las letras, puesto que la escena post créditos será una delicia para los amantes de la película de 1961.

Por buscarle un punto negativo, diré que toda la parte inicial de Cruella de niña me resultó excesiva en cuanto a tiempo de metraje. Me gustó que trataran de dar un fondo al personaje, pero considero que no está demasiado bien logrado para todo el tiempo que dedican a ello.

Conclusión:
La película está muy lograda y agradará a toda aquella persona que la acoja con los brazos abiertos, hace recordar escenas de la película original y sacará sonrisas tanto a los nostálgicos como a los que no conozcan la historia de los 101 dálmatas.