Dudad de la gente que califica War Horse de "mala" o "aburrida". Dudad. Aunque no tanto de la gente que la describe como "simple" o "extensa". Spielberg sabia lo que quería mostrarnos y, sin duda, lo ha hecho. De principio a fin, War Horse nos ofrece un espectáculo visual fantástico, unas localizaciones envidiables y una emotividad plausible.

Por contra, el film puede hacerse demasiado largo para algunos, debido a la simplicidad del argumento: un chico, una guerra y un caballo trotamundos. Partiendo de la hipótesis que estos tres elementos no dan para dos horas y media, el resultado es alentador.

El principal problema de Danny Boyle desde "Slumdog Millionaire" es que no es suficientemente crítico con los guiones que escoge. Quizás necesitaría un buen asesor narrativo a su lado, alguien que lo empujara a arriesgar más, ya que el británico es capaz de deslumbrarnos detrás de la cámara. Todos lo hemos visto en "Trainspotting", "La playa" o "28 días después", por ejemplo. Con guiones mejores o peores, creo que debemos tenerlo siempre en cuenta a nivel cinematográfico. Y en "Yesterday", también.

A pesar de los altibajos del guión, nos encontramos con una película muy entretenida. Un homenaje a la música, a la fama, a la fantasía y al amor. Éste último homenaje, el menos brillante, apenas tiene gancho y se arrastra durante el film. Pero, por otra parte, hay brillantez en muchas partes. Himesh Patel está muy convincente en el papel, la música de "The Beatles" nos cautiva hasta la última escena, y las escenas son dinámicas e interesantes en su mayoría.

En resumen, otra buena película del señor Boyle. Nada más que eso.

Desde hace años que me he considerado un fan de Alex Garland como guionista. Como director también, aunque en menor medida. Considero que el británico aquí ha escrito y dirigido su proyecto más personal, manteniendo el hipnotismo que siempre ha transmitido, con un guión tenso, a veces tranquilo, a veces abstracto y subjetivo, aportando mundos e ideas nuevas, siempre acompañadas de unos efectos de sonido y una fotografía impecable (como suele ser habitual en él). Un producto hecho a su medida. Y, sinceramente, la serie te agarra desde el primer capítulo. Probablemente, la mejor miniserie desde Chernobyl.

He oido críticas que no se ha trabajado suficiente en desarrollar los personajes pero, sinceramente, creo que esta afirmación se va desvaneciendo a medida que avanza la serie. Y es obvio que debe ser así, sin tener unas actuaciones excelentes, la serie va mucho más allá. Y es que, sencillamente, no hay diálogos ni personajes cotidianos porque no se les requiere. Es más, la posible falta de expresión de algunos personajes encaja perfectamente con el ritmo de la serie.

Han un buen guión y una fotografía que te deja boquiabierto. También hay distopía, acción, misterios, mecánica cuántica, conspiraciones, diferenciación desinteresada del mundo que conocemos, 'clifhanggers', determinismo, sonido y música envolvente...

Sin querer desentrañar nada, nos encontramos ante un thriller 'sci fi' tremendo que, sin ser fans acérrimos de la ciencia ficción, podríais recomendar a cualquiera. Vedla.