Para mi gusto, lo único que vale la pena para verla en una sala de cine son las escenas de acción; por otro lado, la historia, deja mucho que desear.

En comparación a la primera entrega, la narrativa es muy irreal. Ya de por sí, en Gladiador I, ver a un emperador peleando en el coliseo es casi irreal, no imposible, pero poco probable. Sin embargo, tiene más sentido la narrativa: un hombre dispuesto a todo por el poder y todos los reflectores sobre él y un general traicionado buscando venganza. Narrativa simple y entretenida. Sin quitar de lado la fotografía excelente y un Soundtrack inolvidable.

Y en Gladiador II, parece una película tipo "Propaganda Americana" todos con Roma y todo para Roma.