1. Parece ser que la Bullock no mató al policía sino que fue su hermana pequeña quien lo hizo. Catastrófica desdicha que la niña de 5 años metiese un taponazo al buen hombre con una escopeta sin ser consciente de lo que hacía, pero bueno, nos lo podemos creer. Lo que no me trago es que la Bullock se coma 20 años de talego (totalmente innecesarios pues la niña no sabía lo que hacía y en principio no se la podría condenar) en pos de nadie sabe muy bien qué.

2. Después de una condena digna del Conde de Montecristo la Bullock está, como es natural, algo desquiciada. Lo que no me cuadra es que cuando los hijos del Sheriff muerto descubren que ella ha salido de la cárcel, hacen todo lo posible por vengar la muerte de su padre. Uno de ellos (el blando) no está tan sediento de sangre como el otro, pero basta una conversación con la ex-convicta para de golpe y plumazo acrecentar su deseo de vengar al difunto.

3. Por conveniencia para el guion, el hermano "blando" pilla a su mujer poniéndole los cuernos con, no os lo perdáis, su hermano el vengativo! Eso es la gota que colma el vaso, después de este ultraje desatará el mal con...
la hermana pequeña de la Bullock, que no tiene nada que ver con todo esto pero es lo que hay. Es ella responsable de la infidelidad? No, pero se hace lo que sea necesario para entremezclar las dos historias y que el drama continúe.

4. Lo que sucede después no merece ni ser resumido, pero me gustaría hacer una mención honorífica a los flashbacks. Cada 5 minutos uno, con una música lenta y tediosa, que no aportan nada nuevo más que cuando revelan la verdad respecto a lo acontecido con la muerte del policía.

En fin, no recomiendo verla porque es una pérdida de tiempo que bien puede invertirse en cualquier otra cosa. Mi recomendación, date un paseo por el parque o llama a tu abuela que seguro que lo agradecerá.