La primera vez que la vi fue a los 13 o 14 años y fuera del contexto de tiempo y lugar, sólo me interesaba y fijaba en la historia de amor; por eso, después de 40 años le guardo un cariño especial. La recomiendo para ver dulcemente entre madres e hijas y que no falte una sábana de pañuelo.

Señoras y señores españolísimos, esta película la vi solamente una vez y jamás volvería hacerlo, y eso que me encantan las películas de amor, pero esta es un abuso de mala voluntad con el espectador. Un guión que no aporta nada, más bien desfallece por trillado. No tengo más que decir.

Excelente sátira del mundo del modelaje, más bien de los modelos. Entretenida pero con algunos detalles un poco subidos de tono y absolutamente innecesarios. La recomiendo muchísimo.

El personaje de Kate Winslet es tan poderoso que estremece su fragilidad; pero el resto de la historia pierde fuerza, se dispersa y finalmente no se desenvuelve a la altura del potencial dramático que crea esta maravillosa caracterización de Hanna Schmitz.