Te atrapa desde el primer momento gracias a su ambientación y personajes. Es una trama complicada, así que hay que estar atento en todo momento. La segunda temporada es todavía mejor que la primera y tiene un final lógico (la primera temporada se acaba con un capítulo que podría ser del montón, sin dejar nada claro) Esperando ansiosa la tercera temporada, hasta le pillas cariño a los personajes y todo.

Es simplemente increíble. De los personajes más realistas y humanos que hay en pantalla. Merece la pena aguantar la primera temporada (que es la introducción aburrida pero necesaria) porque a partir de la segunda simplemente no puedes parar. Un guión genial, súper original, con escenas míticas y personajes que te hacen reír y llorar. Completamente impredecible. Te deja con la sensación en el estómago de no saber lo que pasará a continuación.

A ver, es que es la película de tu infancia. De esas películas que no te cansas de ver una y otra vez. Te sientes un niño otra vez, deseando que llegue tu carta de Hogwarts. Es simplemente mítica.