Reconozco que a mis entrados 40 tacos uno ve el cine con un prisma más crítico y ya no te seduce cualquier cosa.

Lo que han hecho con esta nueva trilogía no es más que una tendencia en nuestra sociedad actual, los productos fast&food. El objetivo de sacar una trilogía con películas cada 2 años (con spin-offs de por medio), se ha notado demasiado en la calidad final de producto. Las prisas nunca son buenas. Y si hay que ir con prisas que menos que un buen director de orquesta que dirija todo el cotarro. El problema, que aquí cada uno ha hecho lo que ha querido y la falta de coherencia entre las tres películas es notable y no solo eso, tampoco se respeta la coherencia con el universo Star Wars.

Y quizás el problema más grave de esta nueva trilogía es la falta de empatía con todos los nuevos personajes. Personalmente, me importa un pimiento lo que le pase a cualquier nuevo personaje de esta saga. Me resulta totalmente indiferente su destino, porque no me llegan a atrapar en ningún momento. La falta de carisma o atracción en los nuevos personajes resulta realmente preocupante y creo ha causado mella en esta saga. Si comparamos a los antiguos: Luke, Han, Leia, Chewbacca, Darth Vader, Lando, Tarkin, Obi Wan, Yoda... con los nuevos: Finn, Poe, Hux, Rey, Kylo, Rose, Kanata... se hace evidente el gran problema. Es más, en The Mandalorian el protagonista (con casco) tiene más carisma que cualquiera de los nuevos.

Y como era de esperar en esta última película de la saga la cosa no ha mejorado. Todo resulta muy atropellado por intentar satisfacer al fan y resolver algunas cuestiones (que no todas). Pero como diría aquel anuncio: "La potencia sin control no sirve de nada". J.J. Abrams intenta dar respuesta a tantos asuntos que hace que el ritmo sea demasiado acelerado. Con todo lo que se cuenta en esta última película se podrían haber hecho tres películas perfectamente. Y es eso, se enseña mucho y muy por encima.

Aparecen nuevos personajes que si los eliminas de la trama no pasa absolutamente nada porque son totalmente prescindibles.

Pues llegados a este punto nos encontramos con el fin de la nueva trilogía que no aporta nada al universo de Star Wars. Ojo, que la película es entretenida pero no es más que un ejemplo del despropósito que ha supuesto esta nueva trilogía.

Algunos errores graves en spoilers

Sin duda, esta serie será un ejemplo de que un gran presupuesto no implica un gran producto. Realmente no tiene ningún aspecto que destaque o que le otorgue calidad al producto final. Es más, estamos ante una serie que si nadie nos dijese que es de Amazon o que es la adaptación de unas novelas, pensaríamos que se trata de una serie B.

Dejando a un lado los libros, a la trama tal y como se cuenta, le falta chispa. Le falta ese “algo” que hace que una serie enganche y eso se nota.

Los personajes. La sra. Pike es la reina de la inexpresividad, siempre con la misma cara de cera. El resto de actores tienen muy poco carisma y es una sentencia de muerte para la serie. Esto nos lleva a un punto en que no empatizas con ninguno, y te da lo mismo que los matasen a todos. Las comparaciones son odiosas pero si comparamos el carisma de los actores de Juego de Tronos es que no hay color.

Los decorados y los paisajes se ven demasiado artificiales. Cuesta horrores sumergirse en ese universo, todo parece demasiado irreal. Mención aparte la caracterización de los trollocs, poco creíble. Todo muy serie B.

En fin, ni la trama engancha ni los personajes tampoco. Que nos queda? Un producto totalmente olvidable. El tiempo lo dirá.