Es una serie divertida y amena, con una historia entretenida sin muchos giros ni sorpresas. Me gustó mucho la primera temporada, con capítulos interesantes y en su mayoría necesarios para la historia, sin mucho relleno, que se ven rápido. Para mi gusto la segunda temporada está un poco floja, ya que excepto algún que otro punto interesante, la mayoría está cargado de relleno y humor, un tanto innecesario y pesado en algunas ocasiones.

Creo que es una serie que imita la dinámica de Juego de Tronos, adaptándolo muy bien e incorporando todos los elementos de la época actual. Para mi gusto retrata muy bien como es la sociedad de los ricos, dejándome en ocasiones con la boca abierta ante algunos actos, y haciéndonos conscientes de que hay personas que están muy por encima de la ley y lo que es correcto. Pero creo que en ocasiones se centran mucho en temas de bolsa, empresa, acciones, y eso limita el público interesado por esta serie.

Mi reno de peluche se ha convertido en una de las mejores miniseries en lo que llevamos de año. Y no es para menos.

El guion, el uso de la luz, la música encajada en los momentos oportunos, los planos y los enormes actores han cocinado una joya que destaca sobre la inmensa cantidad de material que saca Netflix año tras año.

La historia te deja sin palabras, más sabiendo que es un caso real. La frialdad del propio actor de contar y escenificar los hechos a pesar de haberlo vivido en su propia piel, su manera objetiva de hacer que nos caiga mal o no lo entendamos, separándose del común sentimiento de víctima en el que es fácil caer en estos casos o su manera de abrirse ante nosotros y hacernos entender la empatía y la fragilidad del ser humano han cautivado a millones de personas, entre las que me incluyo.

Un fuerte aplauso para Richard Gadd por esta gran obra. Espero que podamos seguir consumiendo cintas del mismo nivel.

Empecé a ver esta mini serie sin muchas expectativas. He de decir que el primer episodio logró causar interés, en su mayor parte porque no entendía nada de lo que estaba pasando. Pienso que la serie es una cosa los primeros 5 episodios, sintiendo los siguientes como una serie distinta. De repente toma un tinte bastante retorcido, con un grado de violencia innecesaria, que me hizo sentirme bastante mal al final. Destaco los giros de guion, algunos son totalmente inesperados. Pero al final no entendí por qué sucedió todo. Se supone que es una serie para pensar, pero deja mal sabor de boca.

La serie ha tenido un boom en las redes sociales, que la ha catapultado a la cima, pero creo que a la mayoría nos queda esperando algo más. La elección de actores ha sido buena, para mi gusto, creando un fandom en torno a ellos que ayuda a potenciar su éxito. El colegio, con los distintos tipos de criaturas y el uniforme evocan a Harry Potter, donde creo que recae parte del atractivo. Personalmente me gusta mucho la cantidad de referencias a Edgar Allan Poe. La historia también crea expectación, ya que no esperaba algunos giros que realiza. Opino que a Miércoles la han hecho bastante humana, aunque no quiera parecer sensible, en el fondo se preocupa por todos. He echado de menos en muchas ocasiones el carácter cruel y vil de la protagonista.