Tiene que gustarte mucho el cine y saber apreciar las habilidades del director para salir contento de la sala. No es una película que guste a cualquiera. Para empezar, NO es una película de terror o al menos para el 90 por ciento de las personas que llenamos la sala. Las risas y los comentarios jocosos en la sala eran continuos. El contraste de lo que esperas después de ver el trailer y escuchar las criticas te lleva a la decepción absoluta. Es arte y solo algunos lo saben apreciar, lo más probable es que salgas pensando que has malgastado tu dinero. El final... en fin, es una gran fumada de todo el equipo de producción. ¿Diferente? Sí, pero no es lo que te esperas. Eso sí, hay escenas y planos que son dignos de mención. En conjunto, no merece la pena gastar lo que cuesta la entrada si eres uno de los que prefieren el cine para disfrutar y olvidarte un rato de tus problemas, y no de los que analizan al milímetro cada detalle. Mi puntuación es para contrarrestar una de las notas altas que ha recibido, es una peli de 4,5 o 4,7.