La verdad es que la peli empieza bien hasta que Charlie y Fifield descubren las bichas esas dentro de la cueva. A ver, tú descubres vida extraterrestre por primera vez en la historia de la humanidad y no se te ocurre otra cosa que querer jugar con ellas "eh, pequeñas!, venid a jugar con papá" y tras adoptar las bichas una actitud claramente amenazante el otro sigue en sus trece, y a partir de ahí comienzan una serie de catastróficas desdichas que convierten la cinta en una auténtica castaña intragable. Lo único que me salva un poco la tarde es haber podido disfrutar de unos efectos especiales de muy alto nivel y sin abusos, sólo para ellos un 9.