No me puedo creer que se considere película a Funny Games. No existe trama, ni diálogos, sólo crueldad gratuita física y psicológica inexplicable y regodeo en la misma.
Pasar dos horas de viendo semejante brutalidad sin hilo conductor lógico, sin venir a cuento de nada,sin una trama coherente, solamente la degradación física y mental de tres personajes (entre ellos un ñiño, ya el colmo) gratuita. Se ha de estar muy enfermo para realizar este tipo de películas.
Actores que deben desarrollar tan sólo una faceta: el sufrimiento extremo. A excepción de dos que son dos muñecos de porcelana sin expresión alguna en el rostro que, por derecho "divino", tiene el control absolutamente de todo sin saber ni cómo ni por qué.

No tengo palabras para describir de forma diplomática y sin ofender lo que he visto. Lo único que puedo decir es que me arrepiento de haber ido a verla y seguro que no volveré a ver otra de este director.