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Críticas ordenadas por utilidad
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5.8
67,222
3
21 de septiembre de 2008
21 de septiembre de 2008
26 de 47 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mr Woody, "passi per caixa".
Menudo "bunyol" como decimos por aqui. Ya sabemos que Mr Roures para marcarse la medalla de haber fichado a uno de los mejores astros del cine contemporáneo le habría pagado una buena quantía aunque solo fuera para explicarnos lo que un guiri al mas estilo turista de borrachera podría decirnos de su experiencia por Barcelona.
Pero hacer una pelicula de ello y llenar la sala de cine con todo un seguido de lelos, que es la cara que se te queda al acabar el film y acabar viendo una pelicula que lo más destacado de ella es que se puede considerar un pase de diapositivas de sus vacaciones en la península, lo encuentro de muy poca consideración.
Su pelicula ¿como habría de calificarse?; ¿es una comedia?, ¿es un drama?, ¿es una excusa para ver al mito Scarlett Johansson montándoselo a lo Fendom emocional con la Pene y un Bardem que desde esa pésima y oscarizada actuación de No country for old men da la talla de un actor venido a menos?.
Menudo "bunyol" como decimos por aqui. Ya sabemos que Mr Roures para marcarse la medalla de haber fichado a uno de los mejores astros del cine contemporáneo le habría pagado una buena quantía aunque solo fuera para explicarnos lo que un guiri al mas estilo turista de borrachera podría decirnos de su experiencia por Barcelona.
Pero hacer una pelicula de ello y llenar la sala de cine con todo un seguido de lelos, que es la cara que se te queda al acabar el film y acabar viendo una pelicula que lo más destacado de ella es que se puede considerar un pase de diapositivas de sus vacaciones en la península, lo encuentro de muy poca consideración.
Su pelicula ¿como habría de calificarse?; ¿es una comedia?, ¿es un drama?, ¿es una excusa para ver al mito Scarlett Johansson montándoselo a lo Fendom emocional con la Pene y un Bardem que desde esa pésima y oscarizada actuación de No country for old men da la talla de un actor venido a menos?.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
El argumento es pésimo, Vicky y Cristina dos guiris al más estilo "Orgasmus" digo Erasmus vuelan a Barcelona para acabar montándoselo a lo grande, y como no con lo mejor que puede ofrecer este pais después del buen jamon serrano de bellota, el sr Javier Bardem. Eso si, esta sórdida aventura que podría hacer un turista en Hospitalet, se hace en lo más fastuoso que puede ofrecer una ciudad como Barcelona y no olvidar un Oviedo que viste sus mejores galas de Fashion Week, no apto para bolsillos de poco fondo.
Mas allá de toda esta sórdida historieta no hay más argumento posible, no hay ni un clímax dramático ni crítica social ni nada de nada, tampoco ni un momento para disfrute de uno de esos diálogos ingeniosos que nos tiene acostumbrado, a nosotros, los seguidores de este gran director de cine que es Woody Allen.
Momento para la reflexión: El único instante en que la sala dio una gran carcajada es cuando la Pene que realmente da gran pena le dice a Scarlett "Niñata de Mierda", eso si en un español ininteligible para Scarlett, recordándonos un humor no visto desde Hostal Royal Manzanares o el Bellotero Pop de Esteso.
Mas allá de toda esta sórdida historieta no hay más argumento posible, no hay ni un clímax dramático ni crítica social ni nada de nada, tampoco ni un momento para disfrute de uno de esos diálogos ingeniosos que nos tiene acostumbrado, a nosotros, los seguidores de este gran director de cine que es Woody Allen.
Momento para la reflexión: El único instante en que la sala dio una gran carcajada es cuando la Pene que realmente da gran pena le dice a Scarlett "Niñata de Mierda", eso si en un español ininteligible para Scarlett, recordándonos un humor no visto desde Hostal Royal Manzanares o el Bellotero Pop de Esteso.

4.8
78,325
1
10 de diciembre de 2006
10 de diciembre de 2006
8 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es realmente lamentable. Una película para al que le guste la acción totalmente insustancial y gratuita sumado a un guión pésimo com una trama que parece hecha por un niño de 4 años.
En Cara a Cara John Woo aún nos lo hace pasar bien a pesar de la siempre interpretación estática de John Travolta, pero en Misión imposible II la cosa coge unos tintes bastante ridículos sobretodo la escena donde a un actor de la tralla de Sir Anthony Hopkins, situado creo que es en Sevilla o una ciudad del sur de España y nos explica las tradiciones de lo españoles. Dice algo así como " Bonita tradición de los españoles que honran a los santos quemando cosas". Seguidamente vemos a gente vestida de Sanfermines haciendo fallas y cantando por la calle a lo Mariachi.... Es triste que siempre que se hable de España sus gentes y sus constumbres ,desde la Industria de cine de EEUU, haya tan poca decéncia y se note tan claramente una falta de documentación tan rotunda.
En Cara a Cara John Woo aún nos lo hace pasar bien a pesar de la siempre interpretación estática de John Travolta, pero en Misión imposible II la cosa coge unos tintes bastante ridículos sobretodo la escena donde a un actor de la tralla de Sir Anthony Hopkins, situado creo que es en Sevilla o una ciudad del sur de España y nos explica las tradiciones de lo españoles. Dice algo así como " Bonita tradición de los españoles que honran a los santos quemando cosas". Seguidamente vemos a gente vestida de Sanfermines haciendo fallas y cantando por la calle a lo Mariachi.... Es triste que siempre que se hable de España sus gentes y sus constumbres ,desde la Industria de cine de EEUU, haya tan poca decéncia y se note tan claramente una falta de documentación tan rotunda.

7.1
103,475
9
9 de mayo de 2011
9 de mayo de 2011
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lost in Trasnlation es una gran película, una maravilla íntima y delicada, un tesoro de pequeños momentos, sobre un paisaje como la ciudad Tokio.
Sofia Coppola imagina paisajes emocionales tan bastos como el océano, capturados en instantáneas y desenfocadas vidas.
El film rehuye una catalogación genérica, se viste de las pieles del estado de ánimo. Los protagonistas del film son unidos como dos almas perdidas que afrontan el mismo pánico existencial. Para Bob, Charlotte es energia juvenil y un futuro sin complicaciones y para ella él es el aliento de la experiencia. Su relación en pantalla va más allá de lo que entendemos por química.
La película es un gran espectáculo que muestra a partir de las sutilezas de sus personajes, una gran belleza, un profundo intimismo, siendo una mezcla de tristeza y alegria.
La paleta cromática y sonora que ofrece Tokio evoca los despertares espirituales de los personajes. Solo cuando huyen del aséptico confort del hotel y bucean en las calles, su relación toma forma. La cacofonía de los ruidos callejeros y la energía eléctrica nos adentran en el caos redentor que vive la pareja.
Tokio emerge como en el escenario más apabullante imaginable. Es experimentado con un pulso entre las nubes en personajes que se comen su propia vida a bocados.
Tokio es un provenir tentacular mostrándonos un lado luminoso y un lado oscuro y numerosas gamas cromáticas entre ambos. Un delirio visual y una vorágine humana como en ningún otro lugar en el mundo conocido.
Si la fotogénia es una cualidad aplicable a los espacios nunca lo es tanto como en el caso de Tokio. Cualquiera diría que esta metrópolis nació y creció para ser filmada.
Un caos de neones multicolor, programas de televisión psicodélicos, videojuegos demenciales, calles demasiado llenas y calles demasiado vacías. Tokio es un película en formato panorámico, una alucinación espectacular e impenetrable.
Tokio es otro planeta para los protagonistas, un lugar tan alejado de su vida cotidiana que lo sienten como un mundo irreal. Ello les permitirá experimentar la ciudad con una actitud libre y abierta.
Sofia Coppola imagina paisajes emocionales tan bastos como el océano, capturados en instantáneas y desenfocadas vidas.
El film rehuye una catalogación genérica, se viste de las pieles del estado de ánimo. Los protagonistas del film son unidos como dos almas perdidas que afrontan el mismo pánico existencial. Para Bob, Charlotte es energia juvenil y un futuro sin complicaciones y para ella él es el aliento de la experiencia. Su relación en pantalla va más allá de lo que entendemos por química.
La película es un gran espectáculo que muestra a partir de las sutilezas de sus personajes, una gran belleza, un profundo intimismo, siendo una mezcla de tristeza y alegria.
La paleta cromática y sonora que ofrece Tokio evoca los despertares espirituales de los personajes. Solo cuando huyen del aséptico confort del hotel y bucean en las calles, su relación toma forma. La cacofonía de los ruidos callejeros y la energía eléctrica nos adentran en el caos redentor que vive la pareja.
Tokio emerge como en el escenario más apabullante imaginable. Es experimentado con un pulso entre las nubes en personajes que se comen su propia vida a bocados.
Tokio es un provenir tentacular mostrándonos un lado luminoso y un lado oscuro y numerosas gamas cromáticas entre ambos. Un delirio visual y una vorágine humana como en ningún otro lugar en el mundo conocido.
Si la fotogénia es una cualidad aplicable a los espacios nunca lo es tanto como en el caso de Tokio. Cualquiera diría que esta metrópolis nació y creció para ser filmada.
Un caos de neones multicolor, programas de televisión psicodélicos, videojuegos demenciales, calles demasiado llenas y calles demasiado vacías. Tokio es un película en formato panorámico, una alucinación espectacular e impenetrable.
Tokio es otro planeta para los protagonistas, un lugar tan alejado de su vida cotidiana que lo sienten como un mundo irreal. Ello les permitirá experimentar la ciudad con una actitud libre y abierta.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
El film como en Casablanca es un romance imposible, un mutuo rescate momentáneo.
La relación que se establece entre los protagonistas será guardada en nuestra memória al lado de la que conjugan July Delpy y Ethan hawke en otra gran película en Antes del Amanecer.
Estas relaciones excepcionales y fortuitas demuestran que las cosas que no se dicen, son tan elocuentes como las que se dicen, confirman que ciertas cosas solo pueden decirse a quienes apenas conocemos pero en quienes podríamos hablar eternamente. Por que como juego o por necesidad ocurren en la clandestinidad y ya sabemos que los encuentros furtivos son más placenteros.
Estas relaciones observadas con indiscreto ojo de voyeur se revelan como una cuestión de colores, de texturas e hipnóticas cadencias. Así como por arte de magia logran que un hombre y una mujer se sientan como si fueran las únicas personas en el planeta.
Muestran la amargura y la rábia que demuestran a su fin las pasiones imposibles, delatando la verdad que hay tras el amor, siendo solo un momento fugaz acaba desvaneciéndose ante los ojos de quienes lo viven.
Excepcional es la gran actuación de Bill Murray por la amargura y aspereza que emana, los etendiendo el absurdo y el patetismo que domina nuestra vida. Interpretando una versión decadente de si mismo y descubriendo que la madurez no es lo que le habían prometido Murray no solo está mejor de lo que nunca antes se ha estado si no mejor de lo que casi cualquier otro actor pueda llegar a estar.
Los protagonistas de Lost in Traslation saben que sus momentos juntos son pasajeros y se preguntan como van a decirse adiós.
En una secuencia final de una gran belleza nunca antes vista descubrimos que su breve encuentro está destinado a perdurar, aunque sólo sea en la memória de las notas del gran tema final Just Like Honey de Jesus and Mary Chain.
La relación que se establece entre los protagonistas será guardada en nuestra memória al lado de la que conjugan July Delpy y Ethan hawke en otra gran película en Antes del Amanecer.
Estas relaciones excepcionales y fortuitas demuestran que las cosas que no se dicen, son tan elocuentes como las que se dicen, confirman que ciertas cosas solo pueden decirse a quienes apenas conocemos pero en quienes podríamos hablar eternamente. Por que como juego o por necesidad ocurren en la clandestinidad y ya sabemos que los encuentros furtivos son más placenteros.
Estas relaciones observadas con indiscreto ojo de voyeur se revelan como una cuestión de colores, de texturas e hipnóticas cadencias. Así como por arte de magia logran que un hombre y una mujer se sientan como si fueran las únicas personas en el planeta.
Muestran la amargura y la rábia que demuestran a su fin las pasiones imposibles, delatando la verdad que hay tras el amor, siendo solo un momento fugaz acaba desvaneciéndose ante los ojos de quienes lo viven.
Excepcional es la gran actuación de Bill Murray por la amargura y aspereza que emana, los etendiendo el absurdo y el patetismo que domina nuestra vida. Interpretando una versión decadente de si mismo y descubriendo que la madurez no es lo que le habían prometido Murray no solo está mejor de lo que nunca antes se ha estado si no mejor de lo que casi cualquier otro actor pueda llegar a estar.
Los protagonistas de Lost in Traslation saben que sus momentos juntos son pasajeros y se preguntan como van a decirse adiós.
En una secuencia final de una gran belleza nunca antes vista descubrimos que su breve encuentro está destinado a perdurar, aunque sólo sea en la memória de las notas del gran tema final Just Like Honey de Jesus and Mary Chain.

7.7
123,258
9
7 de julio de 2007
7 de julio de 2007
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Woody Allen, uno de los más grandes de la comicidad de nuestro tiempo demuestra con tan grata película que el buen comediante es en si un gran trágico, o que la comedia no es sino la otra cara de la moneda de la tragedia.
Allen nos porpone un dilema con grandes tintes trágicos. ¿El hombre que acaba cometiendo el acto mas desleal, el acto del asesinato a sangre fria es inocente o es una víctima?.
Allen nos hace reflexionar sobre el auténtico drama social que enmascara la vida misma, la miseria y lo miserable que es nuestra vida y existencia cuando se ve empañada y aterciopelada con las etiquetas del estilo, la clase y el poder, en definitiva la vida inalcanzable para la mayoría de los mundanos cuyo trasunto no es más que el auténtico veneno que corrompe nuestra decadente civilización.
Allen nos porpone un dilema con grandes tintes trágicos. ¿El hombre que acaba cometiendo el acto mas desleal, el acto del asesinato a sangre fria es inocente o es una víctima?.
Allen nos hace reflexionar sobre el auténtico drama social que enmascara la vida misma, la miseria y lo miserable que es nuestra vida y existencia cuando se ve empañada y aterciopelada con las etiquetas del estilo, la clase y el poder, en definitiva la vida inalcanzable para la mayoría de los mundanos cuyo trasunto no es más que el auténtico veneno que corrompe nuestra decadente civilización.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Ante tan bello film me viene a la cabeza a Oscar Wilde en la Balada de la Carcel de Reading:
Sólo sabía que idea obsesiva apresuraba su paso, y por qué miraba al día deslumbrante con tan ávidos ojos; aquel hombre había matado lo que amaba, y por eso iba a morir. Aunque todos los hombres matan lo que aman, que lo oiga todo el mundo, unos lo hacen con una mirada amarga, otros con una palabra zalamera; el cobarde con un beso, ¡el valiente con una espada! Unos matan su amor cuando son jóvenes, y otros cuando son viejos; unos lo ahogan con manos de lujúria, otros con manos de oro; el más piadoso usa un cuchillo, pues así el muerto se enfría antes. Unos aman muy poco, otros demasiado, algunos venden, y otros compran; unos dan muerte con muchas lágrimas y otros sin un suspiro: pero aunque todos los hombres matan lo que aman, no todos deben morir por ello.
El personaje es principal por sus grandes dimensiones emocionales. Empieza su viaje iniciático por la pirámide de la alta burguesía británica al más estilo o único modo posible, que és la negacion del deseo y el amor. Hecho este que es retratado con mano magistral y fidelidad a la auténtica cara que encubre la máscara de la burguesia pedante e infantil de nuestro tiempo. Una burguesía que ha dejado la explotación del salario de subsistencia del siglos pretéritos pero aún adolece de la misma enfermedad.
Esta enfermedad es la que va apoderándose a cada paso a nuestro héroe trágico hasta su desenlace. Un desenlace que es una comunión o acto de iniciación a la nueva High class a la que sin darse cuenta acaba por formar parte como estandarte de ella.
Esta comunión es la que se basa en la idea fundamental del film. Matar lo que uno ama.
Allen nos propone a modo de reflexión la idea de la arbitrariedad de nuestros actos, la astucia racional que hay tras la ganancia y la pérdida, como meros puntos objetivables desde la propia subjetividad y una crítica feroz a nuestro sistema de valores endiosado por la mas venenosa savia que la nutre.
Aunque nuestro personaje aparece bajo la marca del más atroz de los asesinos, es la víctima principal que se va consumiendo a través de la consumación de cada uno de todos ellos.
Por último y a modo de reflexión final, ¿nuestro héroe trágico seguirá siendo después de tal suerte de desdichas el único en la sala operística que oye lo que realmente entona la soprano o acabará adoleciendo de sordera ante la ópera como cada uno de sus nuevos compañeros en cuya institución acaba de ingresar como nuevo delfín?
Sólo sabía que idea obsesiva apresuraba su paso, y por qué miraba al día deslumbrante con tan ávidos ojos; aquel hombre había matado lo que amaba, y por eso iba a morir. Aunque todos los hombres matan lo que aman, que lo oiga todo el mundo, unos lo hacen con una mirada amarga, otros con una palabra zalamera; el cobarde con un beso, ¡el valiente con una espada! Unos matan su amor cuando son jóvenes, y otros cuando son viejos; unos lo ahogan con manos de lujúria, otros con manos de oro; el más piadoso usa un cuchillo, pues así el muerto se enfría antes. Unos aman muy poco, otros demasiado, algunos venden, y otros compran; unos dan muerte con muchas lágrimas y otros sin un suspiro: pero aunque todos los hombres matan lo que aman, no todos deben morir por ello.
El personaje es principal por sus grandes dimensiones emocionales. Empieza su viaje iniciático por la pirámide de la alta burguesía británica al más estilo o único modo posible, que és la negacion del deseo y el amor. Hecho este que es retratado con mano magistral y fidelidad a la auténtica cara que encubre la máscara de la burguesia pedante e infantil de nuestro tiempo. Una burguesía que ha dejado la explotación del salario de subsistencia del siglos pretéritos pero aún adolece de la misma enfermedad.
Esta enfermedad es la que va apoderándose a cada paso a nuestro héroe trágico hasta su desenlace. Un desenlace que es una comunión o acto de iniciación a la nueva High class a la que sin darse cuenta acaba por formar parte como estandarte de ella.
Esta comunión es la que se basa en la idea fundamental del film. Matar lo que uno ama.
Allen nos propone a modo de reflexión la idea de la arbitrariedad de nuestros actos, la astucia racional que hay tras la ganancia y la pérdida, como meros puntos objetivables desde la propia subjetividad y una crítica feroz a nuestro sistema de valores endiosado por la mas venenosa savia que la nutre.
Aunque nuestro personaje aparece bajo la marca del más atroz de los asesinos, es la víctima principal que se va consumiendo a través de la consumación de cada uno de todos ellos.
Por último y a modo de reflexión final, ¿nuestro héroe trágico seguirá siendo después de tal suerte de desdichas el único en la sala operística que oye lo que realmente entona la soprano o acabará adoleciendo de sordera ante la ópera como cada uno de sus nuevos compañeros en cuya institución acaba de ingresar como nuevo delfín?

6.1
20,388
8
3 de enero de 2016
3 de enero de 2016
Sé el primero en valorar esta crítica
Danny Boyle vuelve a la carga con lo mejor que sabe hacer. Deleitarnos con buen cine, como ya hizo en slumdog millonaire. La receta fundamental es a base de construir una buena historia, que pasaria completamente desapercibida, si no fuera por un gran y brillante montaje, que engancha al espectador a seguirla y a desarrollar los personajes en ella.
La apuesta para este film es clara, desmontar la mitificada figura de Steve Jobs. Un obituario fílmico que tiene más bien la voluntad de rendir cuentas que la de construir una hagiografia más, de las muchas ya realizadas del magnate de Apple. Desmontar la figura de Jobs, como figura de uno de los últimos "self-made man", que personalizan el más puro estilo del sueño americano.
El telón de fondo son justo los instantes previos a cada una de las presentaciones que hizo Jobs a lo largo de su carrera para cada uno de sus esperados productos, que fueron de gran importancia para la comercialización de la marca y quedaron gravadas en el imaginario colectivo identificando a persona, producto y marca.
Fassbender hace un notable trabajo encarnando a Steve Jobs, cuyas sombras, muchas desconocidas para el gran público, prevalecen por encima de las luces ya conocidas. Las turbulentas relaciones personales con su exmujer e hija, su pasado de hijo adoptado, su relación con amigos y colegas del trabajo psicoanalizan al personaje mostrándonos la idea que las personas de éxito, no se forjan si no es a base de grandes renuncias afectivas y personales.
Jobs es una película de diálogo, no gustará a quién busque otro tipo de film en ella. Y le disgusten este tipo de películas. La historia se contruye en ellos, prevaleciendo sobre lo visual. Los diálogos no se desarrollan de forma lenta o pesada si no ritmicamente ajustados, que junto al uso a base de elipsis y flashbacks contribuyen al buen montaje y desarrollo del dramatismo en los personajes.
La apuesta para este film es clara, desmontar la mitificada figura de Steve Jobs. Un obituario fílmico que tiene más bien la voluntad de rendir cuentas que la de construir una hagiografia más, de las muchas ya realizadas del magnate de Apple. Desmontar la figura de Jobs, como figura de uno de los últimos "self-made man", que personalizan el más puro estilo del sueño americano.
El telón de fondo son justo los instantes previos a cada una de las presentaciones que hizo Jobs a lo largo de su carrera para cada uno de sus esperados productos, que fueron de gran importancia para la comercialización de la marca y quedaron gravadas en el imaginario colectivo identificando a persona, producto y marca.
Fassbender hace un notable trabajo encarnando a Steve Jobs, cuyas sombras, muchas desconocidas para el gran público, prevalecen por encima de las luces ya conocidas. Las turbulentas relaciones personales con su exmujer e hija, su pasado de hijo adoptado, su relación con amigos y colegas del trabajo psicoanalizan al personaje mostrándonos la idea que las personas de éxito, no se forjan si no es a base de grandes renuncias afectivas y personales.
Jobs es una película de diálogo, no gustará a quién busque otro tipo de film en ella. Y le disgusten este tipo de películas. La historia se contruye en ellos, prevaleciendo sobre lo visual. Los diálogos no se desarrollan de forma lenta o pesada si no ritmicamente ajustados, que junto al uso a base de elipsis y flashbacks contribuyen al buen montaje y desarrollo del dramatismo en los personajes.
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