Quizá un 7 es una nota de alta, pero es que me dejó muy buen sabor de boca a sabiendas de lo superficial de su historia y de sus diálogos. Coincido con las críticas sobre ese anhelo nostálgico del director. Entretiene, engancha, el prólogo pone el listón, dentro de lo que cabe, alto. Es una película que se presta, en un hipotético futuro, a hacerle un remake con una historia más profunda y oscura. No sería la primera película palomitera que me deja buen sabor de boca

Llegué al cine tres o cuatro minutos tarde pero llegué a tiempo para ver empezar el accidente del principio y que desencadena la particular odisea de los personajes. No es una película con un argumento profundo, ni lo pretende. Es una película de emociones fuertes concentrada en 90 minutos y la banda sonora enfatiza perfectamente en esas emociones, más aun cuando me encanta ir al cine y "sufrir" viendo una película.
George Cloney, un papel muy necesario en la película y Sandra Bullock definitivamente, lo borda, te crees que es una astronauta en su primera misión y haces tuyas las emociones que ella vive.
Los planos secuencia de Cuarón y la realización, a la altura de lo que se espera de él, salvo por un "pero". A sabiendas de que la película está ambientada en el espacio (sic) y de que en la ingravidez lo más difícil es quedarte quieto, abusa de los travelling y de las barrenas con la cámara lo que hizo que por algunos momentos casi me mareo, y eso que no la ví en 3D. Y hay otro "pero" más, que pasará tiempo antes de que una película me haga volver a "sufrir" como esta.

Tanto la interpretación de Manolo Solo como la de Pedro Casablanc brutales. Lo cierto es que, si se juzga solo como obra cinematográfica, no despunta en mucho más, pero si se juzga como documental, lo que aquí se cuenta remueve muchos cimientos, de ahí que quieran censurarla. Me recuerda sospechosamente a lo que pasó en 2004 con la película "Hay motivo".

Ya se ha visto con Wall E y con los planes ambiciosos que tienen para años venideros, pero no escatiman medios en hacer con amor, y con los mejores amos de este arte lo que mejor se les da, que es conmover. Demuestran que se puede llegar al corazón de los espectadores sin hacer chantaje emocional agresivo y con una inteligencia que a menudo se echa de menos en el cine de animación comercial de otras productoras