"La Noche del Cazador" es una película en la que la vida de los adultos es examinada desde el punto de vista de los niños, y en muchos aspectos me recuerda a la gran "Matar a un Ruiseñor" de Robert Mulligan, basada en la novela de Harper Lee. Ambas sitúan la acción en la época de la depresión de los Estados Unidos, en ciudades muy similares, y en la que una pareja de hermanos (en ambos casos un niño y una niña) se encuentran ante situaciones de peligro.

Pero en La Noche del Cazador predomina una atmósfera angustiosa, y es que los niños tendrán que lidiárselas con un terrorífico predicador, asesino en serie que aborrece a las mujeres, una bestia corpulenta con los puños tatuados y sin sentimientos, que no se detendrá ante nada ni nadie hasta alcanzar su propósito (Robert Mitchum volvería hacer un papel semejante unos años más tarde en "El Cabo del Terror").
Ante esta situación los niños se encuentran desamparados, en una comunidad ultraconservadora, fanática y ciega, personificada principalmente en el papel de la incitadora señora Spoon, la dueña de la tienda en donde trabaja la madre de los niños, y que casi da mas miedo que el propio Mitchum.