Cuando esperas ver una nueva versión de "Transporter" o "A todo gas", más que deliciosa es la sorpresa que te encuentras al tener ante tus ojos una moderna versión de lo que pudo ser en su momento "Taxi Driver".
Drive es una película que explota el género "Neo-noir" de una forma más que impecable, con una gran expresividad y un juego de cámaras, luces y sombras, consigue adentrarnos en la historia del conductor sin nombre, perfectamente interpretado por Ryan Gosling, que por amor, se inmiscuirá en situaciones perturbadoras con una violencia explícita que realzará la tensión continua que el misterioso protagonista nos transmite en todo momento. Drive es una genialidad cinematográfica que con un trasfondo lleno de emociones, presenta una estética sombría y tensa que armoniza perfectamente con cada uno de los aspectos de esta magnífica obra.