Es la belleza metafórica, es la vida contada y plasmada, sale de dentro del alma y se vuelve a meter renovada.

Algo te mueve dentro, algo que te deja fuera, no es una obra maestra es una obra de arte.

Cinematográficamente enorme y recuerda por que el cine es el séptimo arte,
tan bella que te embriaga, llena la pantalla de genio, esta película hace que
vuelvas a notar que una cosa son las películas y otra muy distinta el cine.

Conmovedora, nada pretenciosa nada falta ni nada sobra,
todo esta ahí por que tiene que estar y
si algo no esta no es que falta es que no debe de estar.

Puede que algunas veces en el cine busquemos espejos
pero no hay nada mejor que ir y encontrar ventanas.

Puede que no sea perfecta pero,
gracias a que no lo es, es enorme, excepcional, genial y sobre todo viva.

Como no podía ser de otra manera a Christopher Nolan le ha salido una buena película pero con las mangas, la sisa y el tiro grandes, mejor diría gigantes y es normal pero no es culpa suya y es que el ser humano se va a pasar toda la vida buscando un significado a su vida en este universo cuando no la tiene, es simplemente una creación aleatoria de partículas con conciencia de si mismo y esa motita de polvo tanto terrenal como temporal busca su sitio en un mar gigantesco, el director entiende eso y hace una buena peli, entretenidísima, emotiva y con un significado sentimental que llena corazones y te hace salir de la peli con grandes sensaciones eso es innegable, pero lógicamente no es redonda y no la puede cerrar coherente mente, por que nuestra lógica no se puede aplicar a nosotros para con el universo, pero en fin, posiciones existenciales aparte yo me lo he pasado bien.