Un sórdido mundo pos apocalíptico en el que el ser humano padece por la falta de medios vitales para subsistir y dependen de un sistema esclavizador que los empobrece mental y materialmente. De la película resaltan sus escenas de acción, la combinación de monstruosos coches que combinan la gasolina y el fuego, el ambiente hostil y pesimista, además de la excelente caracterización de sus personajes como alienados al sistema y dispuestos a servir al mismo hasta la muerte.
Los personajes de la película destacan por un lado por su locura y fanatismo a una imagen y por otro lado, la esperanza de algunos de ellos para terminar con el sistema esclavista y buscar un mejor futuro para todos.

Acercarse a esta película es encontrarse con parte de nuestra naturaleza humana tragicómica.
Somos por un lado serios y creamos reglas para vivir acorde a lo que creemos y sentimos. Por otro lado somos ridículos y tontos, nos gusta divertirnos y emborracharnos.
Los personajes de esta película son así y parte de ello es que son una familia disfuncional e individualista. Tal como funciona nuestro mundo.
La niña es la que se va formando un carácter, la que va captando los estereotipos de belleza y comienza a evaluarse a sí misma frente a los demás. Va aprendiendo a ser un ser humano con estas singularidades.
Lo mejor de todo que ella es sumamente original y extrovertida. Evidenciándose en el concurso de belleza donde ella es simplemente una niña comparada con las muñequitas vestidas y pintadas grotescamente.