'Bones' es, sin duda, un ejemplo de que debería ser usado en las escuelas de creativos y guionistas. Vease como:
1. Como premisa principal, el exito de CSI, una serie maginifica en pequeñas dosis, repetitiva y sin trasfondo durante más de 20 capitulos.
2. Una serie de novelas de leer y olvidar en menos tiempo del que tardas de colocarlas en la estantería.
3. Una pareja carísmática, con quimica, distintos pero que se necesitan, que trae al recuerdo a Mulder y Scully, por no citar más que un ejemplo.
4. Un buen asesoramiento cientifico y una magnifica imaginacion para idear cada caso y que sea completamente distinto del anterior.

Lo mezclamos todo, añadimos personajes secundarios con carisma y participaciones memorables et... voilà! Tenemos una estupenda serie que no cansa para nada, que engancha, y que te obliga de inmediato a simpatizar con sus personajes por el simple hecho de que, todos ellos son tan distintos y a la vez cercanos, tan divertidos... tan entretenidos.

El esquema de la serie, al igual que casi todas las de moda actualmente, repite patrón capitulo tras capitulo pero, al contrario que muchas, no fracasa en el intento. Todas ellas tienen algo, un desarrollo privado de los personajes, una trama que, por debajo de toda la imagineria de cadaveres, huesos, laboratorios y juicios, engancha al publico.

El desarrollo de la vida familiar de la protagonista, Brennan, la introduccion de nuevos personajes (el Dr. Sweets, impagable durante la tercera temporada), los toques de humor de la pareja protagonista y, por encima de todo, la quimica entre todos y cada uno de los actores de la serie hacen que 'Bones' se haya convertido en un producto mucho mejor que todos aquellos de los que bebe.

Si algo ya existe, utilizalo y mejoralo. Y se conseguirán resultados como estos.

Esperemos que dure mucho y bien.