Es la primera vez que escribo por una película. No es la mejor que he visto desde luego, en su conjunto global, pero algo me impulsa a escribir, tal vez... ¿ellos? El cine puede ser arte de dos formas distintas. Una, es aquella que nos impacta visualmente, bellas imagenes, música, sensibilidad, interpretaciones, etc, un conjunto global redondo, más allá del mero entretenimiento y evasión. Y otra, aquella que va más allá, que te remueve las tripas, te inquieta, te hace pensar, y no se olvida por muchos años que pasen. Interstellar es el segundo ejemplo. Está muy bien hecha, quizá no llega a la belleza magnética visual de las imágenes de 2001 (Odisea espacial), pero en conjunto, con la EXTRAORDINARIA banda sonora y cuidadas interpretaciones, atmósfera densa, inquietante, hacen de ésta película poesía pura. Puede tener fallos, que los tiene, puede dejar cosas por explicar, que las deja, pero el tema es demasiado complejo como para dedicarle una vida entera, así pues ¿qué más se puede pedir en 2,5 horas de película? Lo consigue. Consigue el efecto, removerme por dentro, soñar. Pocas películas se adentran en lo más profundo del ser humano, ¿a dónde vamos?¿Cuál es nuestro sino? Interstellar refleja a la perfección lo PEOR y lo MEJOR de nuestra especie, capaces de destruir nuestro entorno y los vienes de nuestro planeta, y capaces de crear maravillas fuera de todo entendimiento, todavía a años luz de tan solo imaginarlas. Yo quiero películas así, simplemente DISTINTAS.