You must be a loged user to know your affinity with javieryohn
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

7.4
40,290
7
25 de octubre de 2013
25 de octubre de 2013
289 de 343 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sí, La Vida de Adèle es intensa. Sí, la cámara entra hasta el fondo, de la piel y de los sentimientos de los personajes protagonistas. Sí, emociona. Sí, las actrices sobresalen, especialmente una Adèle Exarchopoulos mágica. Y sí, escribo esta crítica casi como terapia porque hace dos días que la he visto y todavía no sé qué pensar. Lo que sé es que sigue ahí clavada en mi cerebro y en mis tripas. Pero...
3 horas de película no son necesarias. No es necesaria esa primera parte tan larga en su adolescencia. Creo que Kechiche no sabe por dónde cortar y no corta. Usar la elipsis con maestría es difícil pero es necesario.
En cuanto al sexo, las escenas son largas y explícitas, y no creo que la de Kechiche sea una mirada poética, o no sólo. Para mí sí es la mirada de un hombre (que se recrea) pero no me molesta. Me gusta esta cruzada contemporánea por normalizar el sexo, me parece necesaria y esa creencia me la confirmaron las toses, los movimientos incómodos y los susurros que las ya famosas escenas provocaron en la sala.
Más allá de eso, la película es pura carne, es vísceras, comida, cuerpos, piel, y desde ahí construye Kechiche mucha verdad (que la hay). Los personajes, sobre todo Adèle, tienen dudas, contradicciones, luchas internas y la cámara de Kechiche los desnuda con maestría.
(Entro más en detalle en spoiler)
3 horas de película no son necesarias. No es necesaria esa primera parte tan larga en su adolescencia. Creo que Kechiche no sabe por dónde cortar y no corta. Usar la elipsis con maestría es difícil pero es necesario.
En cuanto al sexo, las escenas son largas y explícitas, y no creo que la de Kechiche sea una mirada poética, o no sólo. Para mí sí es la mirada de un hombre (que se recrea) pero no me molesta. Me gusta esta cruzada contemporánea por normalizar el sexo, me parece necesaria y esa creencia me la confirmaron las toses, los movimientos incómodos y los susurros que las ya famosas escenas provocaron en la sala.
Más allá de eso, la película es pura carne, es vísceras, comida, cuerpos, piel, y desde ahí construye Kechiche mucha verdad (que la hay). Los personajes, sobre todo Adèle, tienen dudas, contradicciones, luchas internas y la cámara de Kechiche los desnuda con maestría.
(Entro más en detalle en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Me pasa que me sobra instituto y me falta familia porque no puede ser que uno de los conflictos del film se convierta en una caricatura. Y es que las dos cenas enfrentadas (en casa de Emma, padres separados, cultos, refinados; y luego en casa de Adèle, clase media tirando a baja, espaguetis en el menú) son un truco demasiado barato; un truco muy bien rodado, eso sí.
No se entiende tampoco que los compañeros de Adèle se ceben con ella cuando empiezan a intuir su homosexualidad pero luego acepten con normalidad a otro amigo del grupo que es gay declarado. Da la impresión de que los insultos están gratuitamente, que crean conflicto por crearlo porque luego no se resuelve, como tampoco se resuelve la incapacidad de Adèle para decirle a su familia que es lesbiana (no es que no se resuelva, es que a partir de la segunda mitad se ignora).
Hay algunos momentos que casi dan vergüenza. Una discusión "artística" sobre Klimt y Schiele, por ejemplo. O cuando descubrimos que Adèle es una perfecta bailarina de música latina cuando prácticamente no la hemos visto bailar (y cuando lo ha hecho no ha destacado por su gracia). O un beso con una compañera de instituto que es pura trampa de guión (de nuevo, esos compañeros de instituto metidos con calzador).
Al final, Adèle se queda con las mismas dudas con las que empezó. No tiene un sitio en el mundo, no tiene a quien agarrarse, no se ha definido (o al menos, no ha decidido que no quiere definirse, que es una conclusión que me parece muy válida pero que no está en esta película). Falta un final pero quizás eso se deba a que habrá más capítulos en La Vida de Adèle.
No se entiende tampoco que los compañeros de Adèle se ceben con ella cuando empiezan a intuir su homosexualidad pero luego acepten con normalidad a otro amigo del grupo que es gay declarado. Da la impresión de que los insultos están gratuitamente, que crean conflicto por crearlo porque luego no se resuelve, como tampoco se resuelve la incapacidad de Adèle para decirle a su familia que es lesbiana (no es que no se resuelva, es que a partir de la segunda mitad se ignora).
Hay algunos momentos que casi dan vergüenza. Una discusión "artística" sobre Klimt y Schiele, por ejemplo. O cuando descubrimos que Adèle es una perfecta bailarina de música latina cuando prácticamente no la hemos visto bailar (y cuando lo ha hecho no ha destacado por su gracia). O un beso con una compañera de instituto que es pura trampa de guión (de nuevo, esos compañeros de instituto metidos con calzador).
Al final, Adèle se queda con las mismas dudas con las que empezó. No tiene un sitio en el mundo, no tiene a quien agarrarse, no se ha definido (o al menos, no ha decidido que no quiere definirse, que es una conclusión que me parece muy válida pero que no está en esta película). Falta un final pero quizás eso se deba a que habrá más capítulos en La Vida de Adèle.
Más sobre javieryohn
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here