Después de sorprender al mundo con las excelentes "Amores perros" y "21 gramos", el equipo de Alejandro González Iñárritu y Guillermo Arriaga regresan con esta alegoría sobre la incomunicación humana y sus concecuencias globales.
Ambientada en tres países simultaneamente, cuenta la historia de unos pastores, quienes al disparar un rifle, sin saberlo unirán a varias personas y causarán un caos internacional.
Sin duda es la cinta más ambiciosa de González Iñárritu, resulta un viaje doloroso por la soledad y aíslamiento de los tiempos actuales, desde las fronteras entre los países, hasta aquellas causadas por el idioma, pasando por la incomunicación entre padres e hijos, no se puede negar la inmensa importancia del mensaje de la cinta, un imponente e impresionante llamado a la unión.
Apoyada en excelentes actuaciones, demuestra que Brad Pitt, luego de varios años dedicado al cine más comercial y ahora más reconocido por su demasiada conocidad vida conyugal, es capaz de otorgar actuaciones genuinas, confirma el talento de una espléndida Cate Blanchett, y de paso da a conocer a dos excelentes actrices en estados muy diferentes de su vida, la madura Adriana Barraza con una conmovedora actuación y a una joven Rinko Kikuchi, que apunta a ser la revelación del año.
Pero lo que hace a"Babel" una de las mejores películas del año pasado, es que como pocas, es una honesta, cruda y reveladora experiencia sobre la condición humana, algo cada vez más extraño en una cartelera llena de lugares comunes y pretenciosos filmes que creen saber más de lo que realmente exponen.

La muy alabada cinta de Paul Haggis se erige como una prometedora y bien intencionada crítica al racismo y segregación racial presente en los Estados Unidos, pero disminuida por la falta de un guión lo suficientemente sólido como para sostener su gran gama de personajes.
Su gran problema es la ausencia de profundidad de algunos personajes, particularmente los de Sandra Bullock y Brendan Fraser, quienes le otorgan glamour al elenco, pero no aportan nada a la ambiciosa trama drámatica escrita por Haggis y su coguionista.
Tampoco favorecen sus poco realistas diálogos, demasiados pretensiosos y llenos de esa irritante obsesión de Hollywood por que todo suene inteligente.
Aún así tiene buenos momentos, sobretodo cuando trasciende los estereotipos y sus personajes adquieren dimensiones humanas, eso nos permite pensar que en el futuro Haggis podría despuntar como cineasta.

En general sobrevalorada, no termina siendo la obra maestra de la que se habla, aunque gana puntos por ser una valiente reflexión de un tema de gran ínteres actual.