Oda al surrealismo, crítica social disfrazada de una parodia más que gamberra de Doc y Marty de regreso al futuro viajando por el espacio y entre dimensiones para... Para que?

La historia es consistente y parece que las prioridades de Rick cambian porque aunque no lo parezca evoluciona como personaje (hasta el hombre más listo del universo tiene mucho que aprender)

La historia se ambienta en el mundo de One Piece, aunque 400 años antes de que comience la historia principal, y nos presenta a Shimotsuki Ryuma, el legendario espadachín de Wano.

Para poder disfrutarla sin spoilers de One Piece (solo sale uno en la escena final) debes haber terminado el arco de Thriller Bark, aunque dicho spoiler no es gran cosa.

Mi valoración seguramente peca de generosa, pero francamente no le encuentro "debes" a una OVA que en tan solo 25 minutos presenta un protagonista carismático que engancha, unos secundarios complejos, una gran banda sonora y una magnifica animación.

Zeroalcacare nos trae esta serie de animación dónde retrata a la perfección a toda una generación que se ve superara por las grandes expectativas que se le impusieron frente a lo complicado de poder romper y buscar un camino propio que recortar ante la cantidad de zancadillas que ha ido poniendo el destino y la sociedad.

Difícil no empatizar cuando se ve cómo el protagonista, encerrado en sí mismo, se hunde cada vez más hasta tener su pequeño arco de redención con la ayuda de sus amigos y la participación de un momento traumático, de esos que nos obligan a abrir los ojos.

La franquicia de One Piece está en su punto más alto: Saga final en animanga, live action a punto de estrenar su segunda temporada, remake del anime con animación mejorada, OVA de ryuma... Con todo esto por delante cualquiera pensaría que este capitulo iba a ser un relleno cutre, y nada más lejos de la realidad.

Nos presenta el mundo de one piece desde la perspectiva de una persona normal, sin ningún tipo de poder, poniendo en valor la fuerza y poder obtenidos por nuestra banda favorita, cosa que suele pasarse por alto dado que en los shonen suele ir de la mano de un aumento en la escala de poder global que hace que los protagonistas no se vean demasiado por encima de los rivales; pero dejando de lado este pequeño aporte a One Piece, el gran aporte que hace es precisamente en dónde más destaca One Piece, en lo emocional, en pelear por los sueños de uno pese a las adversidades que te encuentres.

Si además de todo esto le añades una animación espectacular, una gran banda sonora y momentos cómicos complementando un hilo argumental corto pero conseguido te queda esta carta de amor a la obra y a su fandom

Antes de estrenarse había voces críticas que nos recordaban el gran fracaso que siempre se ha producido en los live action de animes a cargo de productores occidentales. Yo tuve una cosa clara desde el principio: con Eichiro Oda implicado había razones para el optimismo.

Cómo los artífices de la adaptación han reconocido su libertad creativa era la que les diera Oda y estando él mismo al mando había poco margen para fallar.

En cuanto a la nota baja un poco porque la comparación es odiosa; One Piece es tan bueno que cualquier modificación lo empeora; si no fuera por dicha comparación la serie sería sobresaliente.

El casting es magnífico, los actores recuerdan enormemente a los personajes que interpretan (tanto en personalidad como en su físico), la banda sonora es buena (creo que deberían haber mantenido la del anime en su totalidad) y el ritmo engancha.

Otro punto positivo es la gran cantidad de gente que ha decidido darle una oportunidad al anime o manga de One Piece tras ver el live action.