Vi esta película esperando más bien poco de ella. Por pasar la tarde.
Poco a poco me fue sorprendiendo gratamente. No es una comedia romántica sin más, ofrece bastante más que la media. El argumento es sencillo pero con fondo y Adam, el protagonista, te va atrapando poco a poco con esa ingenuidad que parece ser característica de un síndrome que no permite ser hipócrita y te hace decir las cosas como se piensan.
Más que interesante, los actores bordan el papel y la imagen de Nueva York simplemente espectacular.

Me he animado a escribir al ver tan pocas críticas de esta miniserie que me ha parecido excelente

Basada en hechos reales: tres presos convertidos en actores en una obra cuyo argumento en su propia vida en prisión: lo que les llevó allí, lo que fueron y lo que son.

Un amigo que trabaja en el servicio penitenciario me dijo desilusionado hace tiempo que tras muchos años de experiencia, había dejado de creer en la reinserción. Me pareció una afirmación dura y cuestionable que ahora me ha hecho reflexionar de nuevo

La serie critica también la libertad creativa, de expresión. En este caso de un autor que aun queriendo reflejar fielmente lo que él había entendido de la vida en prisión de unos condenados por delitos muy graves, lleva hasta el final su obra. No se para a pensar en las consecuencias de darles voz sobre sus ideales (apología?) ni de los privilegios que para este fin conseguían los presos y que finalmente utilizaron para burlar las medidas de seguridad y volver a cometer delitos, de nuevo muy graves. Parece que ante todo el autor buscaba dar salida a su proyecto y se encuentra de bruces con las durísimas consecuencias

Es corta y no deja indiferente

Poética, sensible, a ratos con una lentitud que intensifica los sentimientos que vierte y se acrecientan por momentos.......consigue que nos metamos en la piel de los dos protagonistas que viven una historia intensa muchas veces vista pero no tan conmovedora como la que nos cuenta Brizé. En ningún momento la película decae en sensiblería ñoña ni artificiosa. Lo más admirable es la continuidad lineal en el tono, siempre lento, casi musical como una metáfora de la nota que hace saltar la chispa entre los protagonistas, el rudo albañil que despierta ante las partituras de la maestra...
No creo que sea una película romanticona, es mucho más que eso. Muy recomendable.

Fotografía insuperable. Y junto a un derroche de buen gusto de planos y color, aparece un Colin Firth perfecto, encantadoramente british, elegante y....sublime en su actuación tan natural y ceñida a su papel. Para mí, un diez.
El argumento es sencillo y la película tiene muy poca acción, pero en ningún momento se me hizo pesada.
Visualmente, un festín para los sentidos. Así la recuerdo (hace una semana que la vi)

Da igual la nacionalidad, religión o cualquier otro parámetro en el que se pueda agrupar al ser humano, hay cosas que no cambian nunca. En esta familia se dan todos los tópicos que aparecen en las relaciones de parentesco: envidia, celos, traición y sobre todo...aiiiii poderoso caballero don dinero, qué presente estás siempre.
Tópica pero muy interesante, se deja ver bastante bien