La pregunta del título de la crítica es la que más me deja retumbando la cabeza. Una atmósfera increíble, en la que un guión espectacular, y unas actuaciones para levantarse y aplaudir -la mejor actuación de Sean Penn, sin lugar a dudas- te dejan pegado a la pantalla 2 horas 20 minutos; siempre con esa extraña y desesperante sensación en la que algo malo está por ocurrir. Sean Penn me remonta, por momentos, a Michael Corleone en "El Padrino"; Tim Robbins en ese impresionante papel, donde hasta el final deja la duda, y la resolución de toda la historia te deja pasmado; y Kevin Bacon con una muy buena actuación, donde nos muestra que lo humano muchas veces tiene que ver con la justicia. Y cómo olvidar a Laura Linney, que con ese discurso final te deja boquiabierto, en lo que parecía una mujer "intrascendente", terminó tomando partido de una manera abrupta.
En fin, es una pieza que pone en juego traumas, miedos, muchísimo dolor, amistad, amor... no le falta absolutamente nada a esta obra maestra. Es desgarradora y, a la vez, magnífica.
De Eastwood solamente vi "Los puentes de Madison" (obra maestra del cine romántico) y "Río Místico", así que pienso verme todas las demás de, lo que parece, un gran director. Una de las mejores películas que vi en mi vida.