Atroz, absurda, violenta, llena de estereotipos...pero muy divertida desde el principio. La película cuenta con un reparto aceptable que da vida a una serie de capítulos a cada cual más absurdo pero bien ligados entre si, lo que genera que todo se desarrolle en un alto ritmo que no deja momento para la relajación.

Suerte que el director y gran parte del equipo son lituanos, porque no dejan en demasiado buen lugar a sus paisanos!

Me cree cierta expectación por ver esta película, sobre todo por la presencia de Johnny Deep y Meryl Streep, los cuales me parecen dos grandes actores, pero sinceramente, ni siquiera su presencia justifica el tiempo y el dinero perdido en verla.

La historia es sumamente pobre, llena de despropósitos y con agujeros argumentales tremendos, falta de tacto en los cambios de historia y sumamente plana a nivel de representación. Incluso la carencia casi total de efectos especiales contribuye a crear un clima de cutrez extrema que no se va ni cuando dejan de cantar.