You must be a loged user to know your affinity with Zero
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

7.5
144,711
10
31 de agosto de 2014
31 de agosto de 2014
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Regreso al futuro fue y es la ópera prima de comedia y ciencia-ficción, insuperable hasta hoy y entretenida y divertida desde el minuto uno hasta el final como poco a conseguido el cine a lo largo de tantísimos años.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Michael J. Fox encarna al carismático e inolvidable Marty McFly, un muchacho con una vida normal hasta que el excéntrico Dr. Brown (no podría haber imaginado a nadie más que Christopher Lloyd) irrumpe con su DeLorean (la máquina del tiempo) y accidentalmente hace viajar a Marty treinta años en el pasado.
Y aquí comienza una trama principal en la cual no existe ni un solo pero. Todo está perfectamente hilado. Todo está perfectamente contado y nada queda en el aire, ni siquiera la diversión del espectador, la cual no tendrá ni un minuto de respiro.
Marty se cruzará accidentalmente con su padre y su madre en el pasado, provocando que la historia futura sufra un cambio cuando su madre (buena interpretación de Lea Thompson) se enamora de él en lugar de su padre. Una divertidísima y original trama que como anécdota fue desechada por una conservadora Disney a la que no le pareció razonable ofrecer al público una relación amorosa entre una madre y su hijo que viajó al pasado (ellos salieron perdiendo). Mención especial a los guiños que hay a lo largo de la película en relación pasado-futuro.
Con ayuda del Dr.Brown del pasado Marty logrará reunir y enamorar de nuevo a sus padres y regresar a su futuro, algo cambiado debido a como cambió la forma en que sus padres se enamoraron, cerrando una película que nunca será demasiado vieja ni se habrá visto el número suficiente de veces.
Entretenimiento puro y duro. Inolvidable y eterna.
10/10
Y aquí comienza una trama principal en la cual no existe ni un solo pero. Todo está perfectamente hilado. Todo está perfectamente contado y nada queda en el aire, ni siquiera la diversión del espectador, la cual no tendrá ni un minuto de respiro.
Marty se cruzará accidentalmente con su padre y su madre en el pasado, provocando que la historia futura sufra un cambio cuando su madre (buena interpretación de Lea Thompson) se enamora de él en lugar de su padre. Una divertidísima y original trama que como anécdota fue desechada por una conservadora Disney a la que no le pareció razonable ofrecer al público una relación amorosa entre una madre y su hijo que viajó al pasado (ellos salieron perdiendo). Mención especial a los guiños que hay a lo largo de la película en relación pasado-futuro.
Con ayuda del Dr.Brown del pasado Marty logrará reunir y enamorar de nuevo a sus padres y regresar a su futuro, algo cambiado debido a como cambió la forma en que sus padres se enamoraron, cerrando una película que nunca será demasiado vieja ni se habrá visto el número suficiente de veces.
Entretenimiento puro y duro. Inolvidable y eterna.
10/10
10
31 de agosto de 2014
31 de agosto de 2014
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si me preguntaran que profesor me ha inspirado más a lo largo de mi vida respondería "Robin Williams".
Sí señores, Robin Williams me enseñó más en 124 minutos que todos los profesores de mi vida en 20 años. Yo no quería ser ingeniero, no quería ser filósofo, no quería ser matemático..., yo sólo quería ser "yo", y sólo Robin Williams supo verlo.
Esta es la razón de que guarde en un rinconcito de mi corazón la película de Peter Weir y me haya decidido a dar un homenaje a Robin Williams (D.E.P) haciendo una crítica de la película que más me gustó de él.
Sí señores, Robin Williams me enseñó más en 124 minutos que todos los profesores de mi vida en 20 años. Yo no quería ser ingeniero, no quería ser filósofo, no quería ser matemático..., yo sólo quería ser "yo", y sólo Robin Williams supo verlo.
Esta es la razón de que guarde en un rinconcito de mi corazón la película de Peter Weir y me haya decidido a dar un homenaje a Robin Williams (D.E.P) haciendo una crítica de la película que más me gustó de él.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
No es una gran película, no es un argumento sorprenderte (es hasta predecible), no tiene los protagonistas más carismáticos que hayas visto, pero tiene ese mensaje que hará de ella una película que se recordará para siempre.
John Keating (genial Robin Williams) es el profesor que todo estudiante ha deseado y nunca ha tenido. Un profesor que está más pendiente de lograr que realices y alcances tus sueños que de formarte en su más estricta disciplina.
El grupo de alumnos está perfectamente esteriotipado. El hijo obligado a seguir los pasos de su padre contra su voluntad (Robert Sean Leonard como Neil Perry), el chico rebelde e inconformista (Gale Hansen como Charlie Dalton), el chico que ama a una chica que no le corresponde (Josh Charles como Knox Overstreet) y el chico introvertido e inseguro (Ethan Hawke como Todd Anderson), serán las víctimas perfectas de un profesor que les animará a romper las barreras que los limitan, aunque mostrándonos sin tapujos que seguir nuestro corazón no es garantía de éxito, como bien se muestra en los casos de Charlie y, sobre todo, de Neil (aunque siendo sinceros sólo en la ficción Knox se acabaría imponiendo, por medio de poesía, al capitán del equipo de fútbol).
Y la película resumidamente es eso, como estos cuatro alumnos estimulados por su profesor forman un club y se rebelan contra la autoridad e imposición de su colegio y de sus propios padres para seguir sus verdaderos sueños.
Contada así no parece una gran película, pero es una gran película por la filosofía que encierra, siendo magistralmente finalizada con la escena en la que Todd se sube a su pupitre acompañado de sus compañeros para despedir al profesor Keating y demostrarle que sus enseñanzas son realmente útiles.
El Club de los Poetas Muertos es un canto de libertad a una sociedad que te obliga a ser lo que no quieres ser, y una crítica abierta al elitismo. Carpe Diem, pues lo más importante en la vida es ser feliz y yo soy feliz cuando veo esta película.
10/10
John Keating (genial Robin Williams) es el profesor que todo estudiante ha deseado y nunca ha tenido. Un profesor que está más pendiente de lograr que realices y alcances tus sueños que de formarte en su más estricta disciplina.
El grupo de alumnos está perfectamente esteriotipado. El hijo obligado a seguir los pasos de su padre contra su voluntad (Robert Sean Leonard como Neil Perry), el chico rebelde e inconformista (Gale Hansen como Charlie Dalton), el chico que ama a una chica que no le corresponde (Josh Charles como Knox Overstreet) y el chico introvertido e inseguro (Ethan Hawke como Todd Anderson), serán las víctimas perfectas de un profesor que les animará a romper las barreras que los limitan, aunque mostrándonos sin tapujos que seguir nuestro corazón no es garantía de éxito, como bien se muestra en los casos de Charlie y, sobre todo, de Neil (aunque siendo sinceros sólo en la ficción Knox se acabaría imponiendo, por medio de poesía, al capitán del equipo de fútbol).
Y la película resumidamente es eso, como estos cuatro alumnos estimulados por su profesor forman un club y se rebelan contra la autoridad e imposición de su colegio y de sus propios padres para seguir sus verdaderos sueños.
Contada así no parece una gran película, pero es una gran película por la filosofía que encierra, siendo magistralmente finalizada con la escena en la que Todd se sube a su pupitre acompañado de sus compañeros para despedir al profesor Keating y demostrarle que sus enseñanzas son realmente útiles.
El Club de los Poetas Muertos es un canto de libertad a una sociedad que te obliga a ser lo que no quieres ser, y una crítica abierta al elitismo. Carpe Diem, pues lo más importante en la vida es ser feliz y yo soy feliz cuando veo esta película.
10/10
9
27 de junio de 2018
27 de junio de 2018
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
En una sociedad que vive el auge de lo políticamente correcto necesitamos urgentemente este tipo de productos para ver si esta enfermedad se puede curar.
TEOTFW es una serie que amas u odias, no tiene término medio, pero su mérito reside en conseguir que empatices con personas tan psicologicamente inestables como los dos protagonistas.
TEOTFW es una serie que amas u odias, no tiene término medio, pero su mérito reside en conseguir que empatices con personas tan psicologicamente inestables como los dos protagonistas.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Muchos en nuestra adolescencia también creímos o fuimos conscientes de que no encajabamos en esta sociedad y deseábamos hacer lo que hacen ambos protagonistas, largarnos y dejar todo atrás.
Claro que por el camino van comprobando que en realidad son presos de su mundo y que no son tan diferentes de aquellos que creen tan extraños.
Y espero que la serie haya concluido en esta única temporada, tal y como se deduce, porque pretender alargarla a una segunda temporada sería el primer grave error a cometer.
Claro que por el camino van comprobando que en realidad son presos de su mundo y que no son tan diferentes de aquellos que creen tan extraños.
Y espero que la serie haya concluido en esta única temporada, tal y como se deduce, porque pretender alargarla a una segunda temporada sería el primer grave error a cometer.

7.9
133,347
10
2 de septiembre de 2014
2 de septiembre de 2014
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tim Burton nos sorprendió y se alejó de su estética habitual regalándonos la que, para muchos, consideramos su mejor película (no, no me olvido de Ed Wood).
Big Fish nos cuenta la divertida historia biográfica de Edward Bloom (Ewan McGregor en uno de sus mejores papeles), un muchacho de un pequeño pueblo que es consciente, como tantas personas en nuestro mundo, de que éste se le queda pequeño y emprende un viaje con el fin de buscar su verdadero destino.
Big Fish nos cuenta la divertida historia biográfica de Edward Bloom (Ewan McGregor en uno de sus mejores papeles), un muchacho de un pequeño pueblo que es consciente, como tantas personas en nuestro mundo, de que éste se le queda pequeño y emprende un viaje con el fin de buscar su verdadero destino.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Pero la historia no pretende quedarse exactamente en este argumento, no. La película pretende contarnos como padre (un Albert Finney interpretando a Edward Bloom en su vejez) e hijo (un buen Billy Crudup) están distanciados debido a las constantes ausencias y fantasiosas historias de Edward Bloom, y es que su hijo, Will Bloom, siente que realmente no conoce a su padre.
Pero la realidad es que esta historia no nos importa, acaba siendo lo de menos, porque la película no es como acaban reconciliándose padre e hijo donde un ya maduro Will recuerda las fantásticas historias de su padre, mientras éste vive sus últimos momentos, y acaba atando cabos. La película es "Edward Bloom".
Edward Bloom es uno de esos personajes de ficción que se te quedarán marcados para siempre porque cuando ves Big Fish, quieres ser como Edward Bloom, un muchacho muy carismático, que desborda optimismo por los cuatro costados y que no se frenará ante nada para alcanzar sus objetivos. Si esto parece hacer a Edward Bloom alguien muy especial no se nos puede escapar la característica principal que le define, y es que Edward Bloom es esa persona que todo el mundo adora, incluido el espectador, por las exageradas y adornadas anécdotas que cuenta sobre su vida. Y es que la historia de Edward Bloom te atrapa por completo y al final, al igual que su hijo, entendemos que si no estuviera maquillada sería una historia sin más.
El filme está lleno de fantásticos momentos, como cuando un Edward Bloom es elegido por su futura esposa, Sandra (Alison Lohman cuando es joven y Jessica Lange en su vejez), en lugar de a Don Price (David Denman) mientras éste le propina una paliza en la que Edward no se defiende a petición de su prometida y sonríe maravillado con la boca llena de sangre (tan desternillante como brillante). La genial irrupción del poeta Norther Winslow (Steve Buscemi bien como siempre) en la vida de Edward Bloom convertido en ladrón. Y, cómo no, el pueblo de Espectro (Spectre en el original), un lugar idílico que sólo alguien como Edward Bloom sería capaz de abandonar.
La película tuvo la poca fortuna de compartir cartel con otra gigante, El Señor de los Anillos: El Retorno del Rey, y seguramente esto fue bastante determinante en que no acaba recaudando lo que sus productores estimaron, pero hay que reconocer el mérito que tuvo que aguantara la embestida del final de la trilogía de Peter Jackson con mucha dignidad.
Rezaba Edward Bloom en la película que no estaba preparado para terminar en ninguna parte, pero acabó terminado en el corazón de miles de cinéfilos.
10/10
Pero la realidad es que esta historia no nos importa, acaba siendo lo de menos, porque la película no es como acaban reconciliándose padre e hijo donde un ya maduro Will recuerda las fantásticas historias de su padre, mientras éste vive sus últimos momentos, y acaba atando cabos. La película es "Edward Bloom".
Edward Bloom es uno de esos personajes de ficción que se te quedarán marcados para siempre porque cuando ves Big Fish, quieres ser como Edward Bloom, un muchacho muy carismático, que desborda optimismo por los cuatro costados y que no se frenará ante nada para alcanzar sus objetivos. Si esto parece hacer a Edward Bloom alguien muy especial no se nos puede escapar la característica principal que le define, y es que Edward Bloom es esa persona que todo el mundo adora, incluido el espectador, por las exageradas y adornadas anécdotas que cuenta sobre su vida. Y es que la historia de Edward Bloom te atrapa por completo y al final, al igual que su hijo, entendemos que si no estuviera maquillada sería una historia sin más.
El filme está lleno de fantásticos momentos, como cuando un Edward Bloom es elegido por su futura esposa, Sandra (Alison Lohman cuando es joven y Jessica Lange en su vejez), en lugar de a Don Price (David Denman) mientras éste le propina una paliza en la que Edward no se defiende a petición de su prometida y sonríe maravillado con la boca llena de sangre (tan desternillante como brillante). La genial irrupción del poeta Norther Winslow (Steve Buscemi bien como siempre) en la vida de Edward Bloom convertido en ladrón. Y, cómo no, el pueblo de Espectro (Spectre en el original), un lugar idílico que sólo alguien como Edward Bloom sería capaz de abandonar.
La película tuvo la poca fortuna de compartir cartel con otra gigante, El Señor de los Anillos: El Retorno del Rey, y seguramente esto fue bastante determinante en que no acaba recaudando lo que sus productores estimaron, pero hay que reconocer el mérito que tuvo que aguantara la embestida del final de la trilogía de Peter Jackson con mucha dignidad.
Rezaba Edward Bloom en la película que no estaba preparado para terminar en ninguna parte, pero acabó terminado en el corazón de miles de cinéfilos.
10/10

6.2
8,876
8
31 de agosto de 2014
31 de agosto de 2014
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Éste es el perfecto ejemplo de como una película muy poco conocida no tiene por qué ser mala. The Spectacular Now es una historia de amor adolescente de las de verdad, esas que surgen sin darte cuenta y que se van complicando por las diferencias entre ambos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Miles Teller encarna a un muchacho, Sutter con necesidad de llamar la atención y problemas de alcoholismo como consecuencia del abandono de su padre. Su novia le deja y tras una noche de borrachera se encuentra con la responsable e introvertida Aimee (genial Shailene Woodley, como siempre), donde comenzará su particular historia de amor.
Sutter y Aimee son polos opuestos. Ni los espectadores ni los actores secundarios, durante el principio de la trama, creen que su relación pueda tener futuro, pero la película consigue convencernos de que estábamos equivocados, Sutter y Aimee tienen química y pueden tener futuro juntos, el gran logro de la película (y de los actores).
Vemos como la relación entre ambos va evolucionando de manera que uno se va acercando cada vez más al otro, cambiando aspectos de su personalidad que se van haciendo cada vez más afines a los de su pareja. Pero Sutter guarda un gran vacío que ni Aimee puede rellenar y animado por ella se enfrentará a su madre para lograr, finalmente, ver a su padre de nuevo.
Y aquí viene el segundo gran mérito de la película, cuando un ilusionado Sutter descubre la verdadera naturaleza de su padre y no puede evitar ver similitudes entre ambos, lo que le hace replantearse su relación con Aimee por miedo a arruinar el futuro de ella.
Finalmente la película acaba diferente a la novela en la que se basa (!atención spoiler del libro¡), seguramente para dejar buen gusto al espectador y que no abandone la sala indignado, pero que creo que es un error, pues el final literario, a pesar de ser más amargo, no deja de ser un broche perfecto para esta historia.
La película no tiene altibajos porque nunca se te llega a hacer larga, pues tiene una duración más que correcta y no cae en el error de enredarse demasiado en la relación de sus protagonistas, dándonos simple y llanamente la información que necesitamos saber y no más. No es una película que siempre recordarás pero es una buena película.
8/10
Sutter y Aimee son polos opuestos. Ni los espectadores ni los actores secundarios, durante el principio de la trama, creen que su relación pueda tener futuro, pero la película consigue convencernos de que estábamos equivocados, Sutter y Aimee tienen química y pueden tener futuro juntos, el gran logro de la película (y de los actores).
Vemos como la relación entre ambos va evolucionando de manera que uno se va acercando cada vez más al otro, cambiando aspectos de su personalidad que se van haciendo cada vez más afines a los de su pareja. Pero Sutter guarda un gran vacío que ni Aimee puede rellenar y animado por ella se enfrentará a su madre para lograr, finalmente, ver a su padre de nuevo.
Y aquí viene el segundo gran mérito de la película, cuando un ilusionado Sutter descubre la verdadera naturaleza de su padre y no puede evitar ver similitudes entre ambos, lo que le hace replantearse su relación con Aimee por miedo a arruinar el futuro de ella.
Finalmente la película acaba diferente a la novela en la que se basa (!atención spoiler del libro¡), seguramente para dejar buen gusto al espectador y que no abandone la sala indignado, pero que creo que es un error, pues el final literario, a pesar de ser más amargo, no deja de ser un broche perfecto para esta historia.
La película no tiene altibajos porque nunca se te llega a hacer larga, pues tiene una duración más que correcta y no cae en el error de enredarse demasiado en la relación de sus protagonistas, dándonos simple y llanamente la información que necesitamos saber y no más. No es una película que siempre recordarás pero es una buena película.
8/10
Más sobre Zero
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here