Sin dudas de lo mejor del los últimos films independientes norteamericanos. Cuando la fiesta termino, todos se marcharon y nos encontramos entre vasos vacios y ceniceros sucios, es cuando nos adentramos en la vida de "The Ram" Robinson, un luchador de wrestling retirado. El film muestra de forma efectiva la decadencia de un ídolo cuando ya ha sido olvidado y se encuentra en las malas. Nos habla de la montaña rusa de la vida y de los sinsabores a los cuales todos estamos expuestos. Desde lo técnico apreciamos una narrativa visual diferente, una dirección acertada con muchos planos de seguimiento en trevelling (tal los planos del ingreso de los luchadores al cath) y una narración que roza a veces el falso documental (nos recuerda a “American Splendor”). Un arte sobrio y crudo nos sitúa claramente en la realidad del personaje que interpreta Mickey Rourke, el cual nos deslumbra con el mejor papel de su carrera. En "The Wrestler", uno se pregunta en cuanto se inspiro en su propia vida el actor para lograr tan acertadamente el personaje que le valió la nominación al Oscar. Una película del ocaso de la vida de un grande para ver un Domingo a la tarde, en el ocaso del fin de semana.-