Es muy floja, secuencias larguísimas del romanticismo más rancio, que completamente sorprendidos vemos nuevamente aparecer ante nuestros ojos.
Se debe Avisar previamente que este tipo de película tiene su público específico (mentalidades de 12 a 30 años que gustan de filmes blandengues y edulcorados, con parejita guapa). La variante en esta ocasión es que el chico es un neurocirujano encantador, posesivo celoso hasta llegar a la agresión.
Si no estáis en el grupo de gente aburrida a la que agraden las cursiladas románticas, iros a dar una vuelta antes que ver este film innecesario, que nada aporta en pleno siglo XXI.
Parece hecha para satisfacer el narcisismo del director (no olvidar el nombre, Justin Baldoni) y a la vez protagonista, y de la pobre Lively, tan omnipresente como sorprendida y necesitada de papeles debía estar para firmar estos contratos, ella que ha filmado a las órdenes de todo un Woody Allen.
Típico film soso y repetitivo para ver un sábado tarde en las cadenas gratuitas (cuando ya estás al caso que lo que vas a ver es un argumentario de buenos y malos).
Cerrar el círculo, con 80 años de retraso.
Una auténtica pérdida de tiempo. No conozco a nadie a la que le gusten las novelas de la Sra. Hoover.
A mi mujer, una romanticona de cuidado no le pareció mal.
Pero el que avisa no es traidor.

Elena Martín Gimeno, directora, coguionista y omnipresente protagonista, inunda con su belleza exultante esta película, cuyo contenido argumental, con un guion comedido y sincero llegó a resultarme profundo y aleccionador.
Ella es un reflejo del comportamiento de las personalidades narcisistas de nuestro tiempo y Elena, mujer exitosa en la vida real en todas las facetas sabe como acertar, que teclas se han de tocar para transferir al espectador un carácter, sus estados de ánimo, unas emociones que le salen del alma.
Una de las mejores películas españolas de los últimos tiempos. Ya nos lo demostró con IT’S CUTE y SUC DE SINDRIA.
Deseando ver de nuevo a esta genial mujer.

Gran film. El argumento es increíblemente morboso. Ivana Bakero lo borda. Las escenas de pasotismo con su novio porque está encoñada del hermanastro son interpretadas con un verismo por ambas partes real y muy creíble, los besos apasionados, los primeros planos de ella, con la cara descompuesta al acabar el sexo salvaje.
Son pocas las películas españoles que aporten un punto de morbo tan conseguido.
El reflejo de la envidia y los celos en la cara de la amiga de Ivana y de su madre, sublimes, que interpretación tan genial, un diez para las actrices.
La elección de Julio Perillán en el papel de depredador sexual que se sabe irresistible, no tiene desperdicio.
El ritmo no decae en ningún momento. A una escena interesante le sucede otra aún más y así hasta el final.

Dirigida con un buen ritmo, no llega a decaer en ningún momento. No hay escenas pesadas ni anodinas. Los dos protagonistas tienen diálogos inteligentes, el guionista ha cuidado este detalle y es de agradecer.
Entretenida. Se deja ver. Recomendada para gente joven con ideología "Carpe diem". Lucy, conoce a un chico de su estilo y acaban liados, van contándose sus vidas amorosas.
Parece que se han enamorado y desean vivir ese amor al menos por unos días y fin.

Para mentalidades de 10-20 años. Demasiada fantasía. Temática nada interesante, se aleja mucho de la realidad, puede que en el mundo pakistaní tenga gracia, pero aquí en España, lo dudo mucho. No me ha gustado nada. Vimos una hora aproximadamente y la verdad creo que es un film innecesario totalmente.