Después de haber visto Invictus, y echando una mirada hacia atrás, Mystic River es la mejor película que ha hecho Clint Easywood, y una de esas obras maestras difíciles de olvidar.

La primera vez que la ves quedas tan sorprendido que en poco tiempo necesitas volver a verla para disfrutar de nuevo con varias de sus interpretaciones (en especial la de Sean Penn. Enorme). La segunda vez vuelves a pensar: "¡obra maestra!". Creo que es a partir del tercer o cuarto visionado cuando comienza el "cansancio", y entra la duda de si alguien volverá a rodar una maravilla de tal calibre (sólo han despertado sentimientos similares títulos como El Caballero Oscuro o Slumdog Millionaire).

Más que aconsejable. El único defecto de esta película es que a partir de verla le pones un listo tan alto a Eastwood, que es relativamente fácil que te "decepcione", aunque no es director de películas por debajo del notable.