Vaya por delante que entiendo que cada uno pone una puntuación distinta a una película o serie según sus gustos, pero en mi caso, trato de ser lo más objetivo posible siempre, y por poner un caso tengo películas puntuadas con un 2 o un 1 que vería un millón de veces, y otras con un 7 u 8 que con verla una sola vez me basta. Porque más allá de que nos guste o no deberíamos ser imparciales y tratar de calificarlas como lo que son, lo que representan, lo que te cuentan y transmiten, por encima de los gustos personales de cada uno, al menos eso es lo que creo que busca Filmaffinity.

Con Akira pasa esto precisamente, es un claro ejemplo de película con largo tiempo y que es venerada tanto por su veteranía como por aquellos amantes del mundo anime, que abanderan cualquier trazo animado frente a otro tipo de filmografías. En mi caso, me gustan las pelis de ciencia ficción, pero no por ello voy a valorarlas todas con un 10.

En este caso, hablamos de un film que dura 2 horas y que tienes la sensación casi desde el principio de que dure 8. ¿Y cómo es posible? muy sencillo, porque no te cuenta nada en absoluto. Una película en mi caso que decidí ver ya bien crecido ante las buenas críticas que siempre tenía, pero no se salva de la quema ni con el comodín del público.

Estamos ante unos trazos anime que pueden gustar más o menos, en mi caso no son los mejores que he visto, pero es que se centra tanto en la acción secundaria o decorados que la historia principal y sus protagonistas no te cuentan absolutamente nada. Y conforme van pasando los minutos esto se va volviendo en su contra, hasta que la desesperación se adueña del espectador y lo único que desea es que se acabe esta pesadilla cuanto antes.

El mundo del anime ha ofrecido grandes obras maestras, como para querer compararla con Akira, por muchos años que tenga. Lamentablemente no está, ni estará al nivel nunca de otros animes.

Dos años antes Disney nos avisaba de cuáles iban a ser sus intenciones, y aquí se acaba de confirmar. La saga que Lucasfilm terminó fue despedida por la puerta de atrás y sin honores. Esta nueva saga ha irrumpido rompiendo puertas, muros, dignidades y personalidades. No solo tira por alto cualquier posibilidad de acabar en condiciones, sino que se ha atrevido a profanar el buen nombre de actores tan ligados a ella que no destacaron en otra cosa nunca más.

Ver como Mark Hamill, Carrie Fisher, Harrison Ford y el gran Chewbacca son ridiculizados hasta el extremo, es una muestra de la frialdad con la que Disney trata a todo este universo salida de la imaginación de un genio de la creación.

Se junta todo, la buena intención de la horneada de actores nuevos que no basta para aplacar la sensación de que su actuación no deja de ser pobre, con un Adam Driver tan mezquino e insolente con el papel que juega, que parece un crío con un acelerador de partículas sin saber qué hacer, y es que la sombra de Darth Vader es muy larga para que venga cualquier montaraz a usurpar ese trono.

Ni aunque os acompañara la fuerza salvaréis este desastre que pudo ser maravilloso. Me quedo con los Ewoks celebrando lo que no solo fue la victoria contra el imperio, sino el final de la saga.

Si vives en España, voy a ponerte un ejemplo muy sencillo para que entiendas qué es 'Estafadoras de Wall Street'. Es la versión 'HACENDADO' del 'Lobo de Wall Street'. Tiene todos los condicionantes para ser de las peores películas en relación, presupuesto, época en la que se hace, actrices, banda sonora y dirección.

Este es el claro ejemplo de como una historia que está basada en hechos reales, puede ser transformada en una telenovela, pero hasta para hacer telenovelas hay que saber, y si no que se lo digan a 'Pasión de Gavilanes'.

Mala elección de música, que por momentos no deja ni escuchar los diálogos, además de entorpecer el ritmo en cuestión de la propia escena. Una actuación paupérrima, incluida la famosa cantante JLo, que debería seguir centrando sus esfuerzos en la música y dirección perdida por completo. Escenas mal tomadas, diálogos vacíos, trama perdida desde el minuto 1.

Lo único positivo que puedo sacar de esta película, es que tuve 110 minutos para hacer otras cosas mientras la veía.

Una película transgresora en su concepto y cruda en sus imágenes. El hoyo es largometraje que busca removerte sensaciones, y desde luego indiferente no te va a dejar. Un concepto muy bien elaborado, partiendo de una base original para reflejar un conflicto social, político y religioso que podemos extrapolar a la sociedad de hoy. No se anda con rodeos, ni coges vías secundarias para transmitir aquello que quiere predicar.

Donde flojea claramente es tanto en la interpretación, bastante mejorable en los papeles secundarios, a los que no te acabas de creer; y en los diálogos, tan importantes como la trama en sí. Para mi gusto ha faltado algo más profundo y trascendental que fuera acorde con la idea, pero en este sentido no ha sido así y desmerece el resultado impidiendo que luzca con mayor luz.

Sin duda recomiendo verla, quién sabe si lo mismo te hace reflexionar sobre ciertos aspectos.

Estamos posiblemente ante una de las series que más expectativas ha creado hasta el momento. Y no es de extrañar, sí se han gastado en su producción más de 600 M de dólares. Como toda serie compleja, JDT es difícil de asimilar en sus principios, por la gran cantidad de personajes, historias paralelas y tramas alternas. No se queda atrás en cuanto a vestuario, banda sonora o fotografía. Todo esto en su conjunto, hacen de ella una buena materia prima, y si a eso le añades una novela en la que basarse y top en ventas, es que reúne todos los condicionantes para ser recordada por mucho tiempo.

Pero los negocios son los negocios, y pese a todo, el dinero acaba estando por encima de todo, y acaba trastocando planes, precipitando decisiones y deshaciendo por completo todo el entramado complejo que se había elaborado con tanto esmero para acabar en un esperpento del cual quieres huir lo más lejos posible horrorizado de ver lo mal que se puede gestionar un presupuesto.