Así. Más de 2 horas viendo al pobre Vince de 48 años jugando a ser Jason Statham. Por supuesto, el resultado es terrible: es una especie de robot torpe y lento que derrota a enemigos con movimientos tan hábiles como los malos de los Power Rangers. Y sí, mucha cabeza y brazo reventado, pero eso no alcanza. Decepcionante.

En el sofocante desierto de Bone Tomahawk, la desesperación y el miedo de los personajes son palpables, y eso hoy en día, donde pareciera que solo muñecas embrujadas tienen el cetro en las pelis de terror, es tremendamente generoso para con los amantes del género.

¿Cómo podría funcionar un Western de terror? Bueno, Zahler lo hizo, acompañado de un muy buen elenco (mención especial para Richard Jenkins), quien presenta una historia planteada en un ambiente hostil y en una época en que los territorios del oeste americanos tenían más sombras que certezas.

El terror de esta película es Jake Gyllenhaal. Impresionante actuación. Lou Bloom te incomoda y asusta; sus ojos, sus palabras, su sonrisa, la vida que lleva. El suspenso de este thriller se basa en el protagonista, quien te mantiene tenso en todo momento, incluso cuando está solo en su departamento, mientras tratas de dilucidar lo que piensa.

Además, un guión impecable y escenas de acción bien acabadas hacen del debut de Dan Gilroy una película para aplaudir.

Serie cuidada al detalle, desde la narrativa hasta la fotografía. Me sorprendió que una producción latina consiguiera envolvernos en ese ambiente oscuro y crudo al que nos tienen acostumbrados los thrillers nórdicos. Tiene buen ritmo, con solo seis capítulos la historia avanza rápido y nos permite ir uniendo piezas, imaginando hipótesis, sin descuidar atender las secuencias y recuerdos que nos guían sobre las motivaciones de los personajes.

Atrapados en la frialdad inquietante de un aparente idílico barrio residencial de Puerto Varas, “42 días en la oscuridad” logra captar la sofocante atmósfera en la que vive la familia Medina Montes y sus secretos, con sobresaliente actuación de Alcaíno y Di Girolamo.

Recomiendo a quien le haya gustado, leer "Usted sabe quién" de Rodrigo Fluxá, libro que ahonda en el crimen en el que se basa la serie.

"Mamá te necesitaba, yo te necesitaba, eras mi hermano mayor y me abandonaste".

Dos hermanos, una familia destruida. El menor se fue con la madre a otra ciudad, el mayor se quedó con el padre alcohólico y violento por su novia. Tommy, el menor, adoptó el apellido de soltera de su madre y desapareció de la faz de la tierra para su hermano Brendan por años hasta que se encuentran en un torneo de MMA ya adultos.

Si crees que será una película cursi te equivocas. Puedes respirar el dolor, tanto físico como emocional de los personajes. Puedes ver el odio en los ojos de Tommy. Puedes sentir la desesperación de Brendan. Puedes solidarizar con el arrepentimiento del padre. Puedes conmoverte con estos tres hombres adultos que en realidad, aunque pasaran los años, quedaron estancados en esa casa y nunca pudieron sanar, despedirse o perdonarse.

Es una película para no olvidar. Pero ten cuidado, si has vivido algo similar, las lagrimas caerán automáticamente.

¿Por qué no es excelente? En primer lugar, por el "americanismo" completamente irrelevante que verás en algunas escenas. Supongo que el director quiso provocar mayor fervor en los espectadores con tanta parafernalia, pero olvidó que al resto del mundo le importa un bledo los clichés yankees. En segundo lugar, por la esposa de Brendan. No sé si a Jennifer Morrison la obligaron a hacer un papel de tonta o lo hizo de forma natural. Insoportable.